Rafael Amargo, el popular bailaor, se ha sentado en el banquillo de los acusados para ser juzgado después de que el juicio se suspendiera por la renuncia de Eduardo de los Santos, exproductor del artista, a su abogado. Ahora, se acusa a Rafael Amargo de un delito de tráfico de drogas, que atenta contra la salud pública, en su antiguo piso del barrio de Malasaña.
Hasta el momento, el artista permanecía en prisión provisional por el incumplimiento de las medidas cautelares impuestas por la Fiscalía de Madrid de acudir a firmar las comparecencias quincenales ante el juzgado.
El juicio contra el bailarín Rafael Amargo
A partir de hoy, la Audiencia Provincial de Madrid juzga al bailarín y coreógrafo Rafael Amargo por la presunta venta de estupefacientes en su antiguo piso del barrio de Malasaña. Al parecer, Rafael Amargo habría vendido de manera “persistente” estas sustancias a terceras personas a cambio de dinero, suponiendo un delito contra la salud pública.
Desde diciembre de 2023, el bailaor cumple prisión preventiva a instancias de la Fiscalía de Madrid por quebrantar las medidas cautelares impuestas. Rafael Amargo dejó de acudir a la firma de las comparecencias quincenales ante el juzgado. Según explicó el coreógrafo ante los magistrados, dejó de ir por la situación de “estrés y malestar” que le provocaban las comparecencias. Además, explicó que de la “repercusión mediática” se estaban beneficiando económicamente otras personas y no él.
Su juicio estaba previsto para celebrarse en junio de 2023, pero se suspendió cuando el exproductor Eduardo de los Santos renunció a su abogado. Después de este momento, el artista mostró un gran malestar. “Qué culpa tengo yo, que lo estoy haciendo todo correcto. Hay cizaña sin sentido. Esto le está costando la vida a mi padre, que está agonizando en un hospital. Pido humanidad porque no se puede estirar más y pido por favor a la fiscal que sea profesional”, señaló.
Desde hoy y durante los días 10,11 y 12 de abril, el bailaor se sentará en el banquillo de los acusados junto al productor por la presunta venta de estupefacientes en su antiguo piso del barrio de Malasaña. Al parecer, los dos acusados conseguían los estupefacientes de manera "conjunta" de sus administradores. Después, la repartían entre los dos para venderla a terceras personas y Amargo lo hacía desde su domicilio. Será en la última sesión del próximo viernes cuando Amargo declarará, según la petición de su abogado Marcos García Montes.
La intervención policial
La Policía ha descartado que las sustancias intervenidas al coreógrafo fuesen para su consumo propio y señala que Amargo recurrió al tráfico de drogas. Según pudieron observar los dispositivos de vigilancia sobre su vivienda, la Policía Nacional observó cómo numerosas personas acudían al interior para luego salir de manera apresurada.
Los agentes policiales pudieron intervenir a dos personas que salieron del domicilio y encontraron sustancias estupefacientes que habían adquirido ahí. La fiscal solicita ahora una pena de 9 años de cárcel por el presunto delito contra la salud pública. La Policía señala también que el dinero recaudado se habría utilizado para "financiar" el espectáculo de Yerma, una obra teatral.
Más causas para Rafael Amargo
A Rafael Amargo también le investiga el juez de la Instrucción número 27 de Madrid por la presunta comisión de un delito de tráfico de drogas y atentado a la autoridad. Surge a raíz de una denuncia que le interpusieron en julio de 2023 sus vecinos por la presunta venta de estupefacientes en su piso de la calle Espíritu Santo de la capital. Rafael Amargo quedó en libertad provisional tras ser detenido por estos hechos en Alicante. Tras esta decisión, la jueza le prohibió salir del país y le impuso la obligación de compadecer quincenalmente.