El grito de Carlo Costanzia di Costigliole: sale en defensa de sus tres hijos y se ceba con Lequio

El aristócrata italiano, padre de Carlo Jr., Rocco y Pietro, sale en defensa de sus hijos porque considera que los periodistas españoles "al final sólo quieren polémica y machacar"

Enrique Espada
Enrique Espada

Periodista especializado en actualidad

Carlo Constanzia padre
Gtres

Carlo Costanzia, el aristócrata italiano que saltó en los años 90 a la fama en nuestro país por ser el ex marido de Mar Flores, vuelve a ser -sin buscarlo- de nuevo protagonista de revistas, diarios digitales y programas de televisión españoles. Pero esta vez por 'culpa' de sus complicados hijos...

Si hace tan solo unos meses su nombre empezó de nuevo a oírse tras décadas sin saber nada de él a razón de los recientes y graves problemas con la justicia de su hijo Carlo, fruto de su matrimonio con la conocida modelo que ahora mismo participa en El desafío, ahora una nueva trama delictiva relacionada con sus hijos pequeños italianos, Rocco y Pietro, le sacan completamente del anonimato para defenderlos. Así lo expresa el conde italiano en un incendiario comunicado en el que ataca sin piedad.

"Verdaderos terroristas de la desinformación"

"Mis hijos no eran conocidos ni famosos, jamás han aparecido en ninguna revista o programa de televisión, y tampoco he vendido reportajes en su nacimiento. Pero han tenido el derecho a la máxima exposición mediática solo por el hecho de ser hermanos de otra víctima de las mentiras y las manipulaciones, a su vez hijo de una madre santificada", dirigiéndose así en su carta abierta a periodistas y comentaristas de la televisión de nuestro país como "verdaderos terroristas de la desinformación".

Un comunicado en el que los ‘fantasmas’ de los 90 -cuando su relación con Mar Flores le puso en el ojo del huracán de toda la prensa española- vuelven para el empresario, ya que tiene claro que "podría pasar uno por uno desmintiendo todas las mentiras, como ya hice en su día con las mentiras sobre mi persona hace casi 30 años, pero de poco sirve porque ya lo han demostrado muchas veces y últimamente con Carlo". 

“Al final sólo quieren polémica y machacar"

“Al final sólo quieren polémica y machacar. Les da igual la verdad, desde siempre. Ahora es el turno de otros familiares... a ver si quieren también desenterrar algún pariente del pasado para ver si ha hecho algo malo", explica también en este escrito con el que su hijo con la actriz española seguro se siente identificado por haber sido, en su momento, un niño hijo de famosos que sufrió también tantos ataques en una época donde la protección al menor no tenía la relevancia que hoy sí tiene.

El conde, en su alegato, no duda en poner nombre al contertulio que más daño le está haciendo desde el sofá de Vamos a ver, en Telecinco. Es también aristócrata e italiano. Así de duro es con Alessandro Lecquio en este manifiesto que acaba de hacerse público: "Un personaje que ha basado su vida en organizar encerronas a gente para poder chantajear y que ha vendido portadas de sonadas traiciones y que lleva 30 años comiendo gracias a hablar mal de los demás, sin pegar palo a su vida, se permite el lujo de juzgar a mi familiar, mejor que se enjuague antes la boca, que ya huele muy mal desde hace mucho tiempo". 

Sus dos hijos pequeños en prisión: las claves

Los hermanastros, Pietro (23) y Rocco de Carlo Constanzia Jr. se encuentran desde el 20 de marzo en prisión preventiva por un supuesto ataque con machete a otro joven por la tarde (17.30) y en plena calle del barrio Mirafiori Norte en Turín, Italia, que por el momento se ha saldado con la amputación de una pierna de la víctima. Y a partir de aquí poco más se sabe, pues lo último que ha trascendido a nuestro país es que el primero se habría acogido a su derecho de no declarar.

Aún no ha comenzado el proceso judicial por el que seguramente se les sentará en el banquillo en los próximos días, pero varios testigos y otras pruebas e indicios les colocarían como principales acusados de estos hechos delictivos de los que, por el momento, también se desconoce con total certeza el móvil.

Las autoridades italianas barajan estas dos posibles causas, aunque se acercan más a la primera: por celos relacionados con la víctima y la novia de uno de ellos o, simplemente, un ajuste por drogas.