El peor temor de las monjas de Belorado podría cumplirse pronto. Pese a su constante negativa,las cismáticas clarisas de Belorado deberán abandonar sus dos conventostal y como han notificado fuentes del Arzobispado de Burgos. Aunque el juicio de este caso no pudo celebrarse el pasado mes, esto no ha impedido a la justicia tomar una decisión sobre su mediática situación. Ellas ya habrían recibido las notificaciones de desahucio, aunque guardan un último as bajo la manga. Las religiosas han contrarrestado junto a su abogado esta recisión con un recurso que ya ha sido admitido a trámite.
Las monjas de Belorado se niegan a abandonar los conventos
Todavía es pronto para conocer la fecha en la que las clarisas de Belorado podrían ser desahuciadas. Sin embargo, la decisión está tomada tal y como han señalado fuentes del Arzobispado de Burgos en ‘El Español’. Las clarisas ya han recibido las notificaciones de desahucio por las que tendrán que abandonar tanto el monasterio de Derio como el de Belorado. Sin embargo, todavía “no se ha señalado ninguna fecha” para ello. Este escenario ha sido una posibilidad que contemplaba el Arzobispado desde hace meses, aunque las clarisas de Belorado se han negado a sumirlo durante todo este tiempo.
Era el 30 de julio cuando se iniciaban los trámites para el desalojo de las clarisas excomulgadas. Hasta ahora, el Departamento de Bienestar Social e Igualdad de la Diputación Provincial de Burgos ha evaluado su situación para tomar una decisión. Finalmente, la conclusión ha sido clara. Las clarisas deberán abandonar ambos monasterios ya que no pertenecen a la comunidad religiosa. También el Arzobispado de Burgos se ha aferrado a este motivo para expulsar a las clarisas de sus muros, mientras que ellas aseguran que estos les pertenecen.
Según Mario Iceta, si reniegan de la Iglesia Católica ya no ejercen ningún derecho sobre los conventos que ocupan. Sin embargo, ellas se niegan a aceptar esta orden y, de hecho, todavía no se han rendido. Florentino Aláez, su abogado, asegura que han presentado un recurso contra esta decisión que ya ha sido admitido a trámite. Será cuestión de tiempo que la justicia evalúe la situación y tome una nueva decisión sobre la causa
Las clarisas afrontan un segundo frente judicial
Mientras que esta causa se esclarece en los juzgados, las clarisas de Belorado afrontan un segundo frente. Su letrado ha señalado que su segundo trámite sigue adelante. La demanda interpuesta en julio de 2024 contra el arzobispo de Burgos fue admitida a trámite el mes pasado. Con ella, las religiosas pretenden “que se reconozca a las dos comunidades de monjas”, tal y como explica el letrado en el citado medio. Además, esta misma demanda trata de conseguir que la Justicia reconozca su derecho a separase de la Iglesia Católica y se declare la ineficacia de Mario Iceta como arzobispado de Burgos y, por ende, también de la Santa Sede.
El último movimiento de las clarisas bajo los muros de la Sata Sede
En mitad de las batallas legales que afrontan, las religiosas anunciaban hace pocos días mediante sus redes sociales una nueva decisión: la reconstrucción del tejado de Orduña. “Se ha convertido en el epicentro de los desafíos estructurales y económicos de la comunidad. La monumental labor de las hermanas no solo aseguró la supervivencia del monasterio, sino que también reforzó su valor como testimonio de la pericia artesanal y la fe que lo vio nacer”, cuentan en su última publicación de Instagram. Lo cierto es que la labor de reconstrucción ya ha terminado y anunciaban esta noticia pocos días después de comenzar muy orgullosas.
“Este tejado renovado es un símbolo de esperanza y perseverancia, un recordatorio de que incluso los mayores desafíos pueden superarse con dedicación y propósito. Al asumir el proyecto, las religiosas enfrentaron un monasterio envejecido y un tejado gravemente deteriorado, con 47 goteras que amenazaban la integridad de la estructura. Las filtraciones de agua comprometían no solo el edificio, sino también la misión de la congregación”, sostienen.
Las clarisas se han mostrado muy orgullosas y felices de los resultados obtenidos. “El resultado es un espacio diáfano y luminoso, que combina funcionalidad con una atmósfera espiritual única. Además, se reformaron áreas como el obrador y el taller de la huerta, se instaló un ascensor para mejorar la accesibilidad y se colocaron 72 placas fotovoltaicas, destacando el compromiso con la sostenibilidad”, sentencian en un comunicado a través de sus redes sociales. Por el momento, no han hecho público cuál será su próximo movimiento, pero si han dejado claro que no van a abandonar los monasterios por los que tanto están luchando.