¡Vaya semanita! Se nota que nos queda poco para cerrar el chiringuito de ‘Sálvame’. Al final, eso se refleja en nuestro estado de ánimo. Aunque nos entreguemos cada tarde con la misma pasión que durante estos últimos 14 años, entre nosotros queda un poso de tristeza. Hacer un programa sabiendo que se acaba no es igual que hacerlo sabiendo que continúa. Son cosas completamente diferentes.
Ahí seguimos, peleando y luchando en una semana de alegría personal por haberme convertido en tía abuela. Mi hermana es abuela y, por fin, ha podido conocer y disfrutar de su nieto. Además, mi madre ha cumplido el deseo que tenía en su vida: convertirse en bisabuela. Les deseo toda la felicidad y toda la salud del mundo a mi sobrino, José, y a su mujer, Paola, para que puedan criar a su hijo, Marc. Ojalá, siempre, sea un niño sano, feliz y que pueda disfrutar de la gran familia que tiene por ambas partes. Sí que hay una cosa que me hará mucha ilusión. El día que vayan a ver a la bisabuela, Teresa, será un acontecimiento especial. Espero que lo hagan cuanto antes y que yo pueda ser testigo de ese momento para ver cómo reacciona mi madre cuando tenga en sus brazos a esa criatura.