Hoy quiero hablaros de una compañera de cadena, Marta Riesco. No soy ni tu enemiga ni tu amiga, porque no te conozco de nada. No he cruzado dos palabras en mi vida contigo, tan solo un hola o un adiós por los pasillos de Telecinco. Tengo la sensación de que todo lo que estás viviendo ha hecho engordarte. Probablemente, estés siguiendo las directrices de alguien a quien amas, como has confesado públicamente. ¿De qué te sirve?