Hace apenas un mes, al acabar de grabar ‘Hay una cosa que te quiero decir’, me enteré de que Patricia Conde estaba en un plató de Mediaset ensayando ‘Ciento y la madre’, su nuevo programa.
No lo dudé: me planté en el mismo para desearle suerte a la que ahora es mi compañera. Creo que se quedó sorprendida pero es que a mí, en el caso contrario, me gustaría que hicieran lo mismo. De ese encuentro surgió la idea de que participara en su primer programa; grabamos el cameo dos semanas después. Patricia y Ángel Martín fueron, durante varios años, el azote de los que nos dedicamos a esto de la crónica social. Nosotros, que nos creíamos intocables, encajamos mal las críticas y particularmente yo hice lo peor que se puede hacer en estos casos: entrar al trapo. Patricia y Ángel nos destruyeron a golpe de ingenio aunque con los años cayeron en el mismo error que ellos criticaban: se volvieron crueles, déspotas y descarnados con los personajes de los que hablaban. Cuando acabó ‘Aquí hay tomate’ me fui a Barcelona a ver la vida pasar porque en Madrid no se acordaba de mí ni mi madre. Una tarde, paseando por Passeig de Gràcia, entré a la Casa del Libro y me encontré con el libro de ‘Sé lo que hicisteis’. Busqué el capítulo donde hablaban de mí y me avergoncé leyendo las palabras que me dedicaban. De una manera bastante burda me catalogaban, cuando menos, como el ser más despreciable que había parido la televisión. Me sentí como una mierda. Cerré el libro y salí del local muy tocado, casi huyendo. Afortunadamente, todo eso forma parte ya de la historia, de mi historia. De aquella época aprendí a no juzgar que mis compañeros trabajaran en uno u otro lugar. Ejemplo: a mi admirada Lucía Méndez le parece vomitivo el universo ‘Sálvame’. Sin embargo jamás escuchará de mi boca valoración alguna sobre que trabaje en una tertulia –‘El Mundo en libertad’– a las órdenes de Carlos Cuesta. Concluyendo: aunque a mí me tocara mucho las narices, Patricia tuvo momentos memorables en ‘Sé lo que hicisteis’. Bordaba su papel. Le deseo lo mejor en su nueva etapa.