Jorge Javier Vázquez

Jorge Javier Vázquez

Carmen Gahona

"La conclusión es unánime: la Gahona está haciendo polvo a la Bollo"

Llega al ‘Deluxe’ Carmen Gahona dispuesta a repartir leña. La veo momentos antes de comenzar el programa, colocándose el micrófono, y no la reconozco. Acostumbrado a verla paseando por la calle con el pelo con escaso arreglo y sin una gota de maquillaje me cuesta asimilar que la señora que está en plató es la mujer de Chiquetete.



 

Tiene fuerza. Garra. Minutos antes de empezar a entrevistarla me aguanta la mirada en un claro intento de intimidarme. Permanecemos los dos en silencio. Después de un ratito viene a decirme que la trate bien porque así no tendremos ningún problema.

 

Carmen Gahona es una flamencona con muchos años de cabreo reconcentrado y cuando doy el pistoletazo de salida a la entrevista comienza a soltar misiles de largo alcance contra Raquel Bollo. Uno tras otro, sin descanso, como si no hubiera mañana. Cuando llegan las publicidades hablo con los colaboradores y la conclusión es unánime: la Gahona está haciendo polvo a la Bollo.

 

No sabemos si lo que dice es verdad pero lo cuenta con tantísima fuerza que el plató permanece en un silencio sepulcral. Carmen Gahona tiene muchísimas cosas a su favor: es un personaje nuevo, su discurso engancha, posee vehemencia, un vocabulario destructor y un sentido del humor ligeramente burbujeante. Sin embargo, tiene dos cosas que juegan muy en su contra: esa sensación de que tiene más gracia que nadie y que va muy sobrada.

 

Gahona ha llegado a nuestras vidas tras una larga sequía de personajes nuevos. En su primer envite ha caído en gracia. En su mano está el seguir siendo graciosa o convertirse en esa señora cargantemente chisgarabís que te toca de compañera de mesa en las bodas y no sabes cómo quitártela de encima.