Puede que el exceso de caída capilar que experimentas estos días te anime a acudir a la peluquería a buscar un corte de pelo que te dé una solución drástica. También puede que, después del verano. Estés deseando experimentar con algunos de los cortes de pelo más en tendencia. O puede que, sencillamente, hayas oído hablar del nuevo corte de pelo que arrasa a la hora de dar volumen y estés deseando probarlo en tu propia melena. Aunque pueda parecerlo, no, no se trata del novedoso wolf cut, es más bien una fusión entre dos grandes clásicos que funciona a las mil maravillas entre las que quieren lucir melenón con maxivolumen. Se llama shullet y es el corte de pelo a capas que está arrasando este otoño con el que decir adiós a una melena pobre.
Lo hemos visto en actrices como Jenna Ortega o Úrsula Córbero, aunque las pioneras fueron la propia Scarlet Johansson a principio de los 2000 y una siempre visionaria Miley Cyrus. Y tú, ¿te atreves con el corete de pelo con el que las celebs presumen de melena con volumen?
Shullet, el corte de pelo que demuestra que la mezcla es garantía de éxito
Si sigues un poco las tendencias capilares y eres de las que se quedan con los nombres, te habrás dado cuenta que el shullet es un corte de pelo dos en uno, la mezcla de dos clásicos con un resultado increíble. Este estilismo capilar no es más que una combinación entre dos cortes de pelo clásicos y muy setenteros: el shag y el mullet. Ahora que la rebeldía capilar gana terreno y que la búsqueda del volumen está mucho más trabajada, es un corte de pelo que se ha popularizado bastante.
Por un lado, el corte de pelo shag es característico de los 70 (nada que ver con el corte de pelo mariposa) y que se caracteriza por sus capas desiguales y textura despeinada, que aporta volumen y movimiento al cabello. Suele aportar un aspecto muy desaliñado, por lo que fue top entre las amantes de lo grunge.
En el caso del mullet, si has seguido de cerca los estilismos más atrevidos de Miley Cyrus, sabrás reconocerlo al instante. Se trata de un estilismo con la parte delantera y los lados bastante cortitos, mientras que la parte posterior se mantiene bastante más larga, con un contraste muy evidenciado. Arrasó en los 70 y 80 entre las mujeres más atrevidas y alternativas.
En el caso del shullet, este corte de pelo mezcla lo mejor de ambos estilismos capilares: el largo y la textura del shag en la parte superior y la fluidez o longitud del mullet en la parte trasera. Es un corte versátil que se adapta a diferentes tipos de cabello y se puede personalizar con más o menos capas, texturas, o largos, según las preferencias.
Cómo deben ser las capas de un shullet para conseguir mayor volumen
La idea de este corte de pelo, más allá de crear un aspecto transgresor, es hacer de las capas estratégicas las mejores aliadas para ganar volumen. Por eso, en este estilismo, las capas juegan un papel fundamental. A la hora de conseguir ese volumen, hay que diseñar las capas a conciencia y estas son algunas de las claves para lograrlo.
- Capas desiguales: Las capas en el shullet deben ser irregulares y desestructuradas. Esto ayuda a dar ese efecto despeinado y lleno de movimiento que caracteriza al corte, creando textura y volumen.
- Capas cortas en la parte superior: Para añadir volumen en la zona de la coronilla y dar más cuerpo al cabello, es esencial que las capas en la parte superior sean cortas. Estas capas más pequeñasdan la sensación de una melena más gruesa y levantada.
- Capas más largas hacia los extremos: En la parte trasera, donde predomina el estilo del mullet, las capas deben ser más largas para mantener ese toque característico del corte. Estas capas largas equilibran la ligereza de las capas cortas de la parte superior.
- Desfilado o texturizado: Esto es clave si no queremos que las capas se noten demasiado o que presenten un corte demasiado abrupto. Hay que desfilar las puntas oara suavizar la transición entre capa y capa y que el cabello no pierda volumen (el temido efecto capas vacías.
- Estudio previo del cabello: ¿Cuántas veces hemos ido a la peluquería a por el corte de pelo de la famosa de turno y el resultado no ha sido el esperado? Quizás su estructura capilar o grosor, además de los propios rasgos fáciles, entre la famosa y tú no tienen nada que ver, por eso es importante que el especialista conozca nuestro cabello y así lo trabaje de una u otra forma. Si el cabello es fino, se pueden agregar más capas y trabajar el texturizado para crear volumen y movimiento. Si el cabello es grueso o rizado, las capas deben ser menos pronunciadas para controlar el volumen y evitar un exceso de frizz.
¿El shullet favorece a todo el mundo?
Por regla general, el shullet es un corte de pelo que favorece a la mayoría de rostros y cabellos. Como decíamos anteriormente, sólo hay que tener en cuenta nuestra estructura capilar y el tipo de rostro. Os desvelamos algunas claves capilares para adaptar un shullet a cada cabello y rostro.
- Rostros ovalados: Es el más versátil de los rostros (si es el tuyo, siéntete afortunada) y el shullet suele quedar bien porque se adapta fácilmente a esta forma, realzando las facciones de forma muy favorecedora.
- Rostros redondos: Las capas desiguales del shullet pueden ayudar a alargar visualmente el rostro, añadiendo estructura y dando la sensación de verticalidad. Lo que toda mujer con rostro redondeado busca.
- Rostros cuadrados o angulosos: El shullet es un corte de pelo que tiene a suavizar los rasgos más marcados con sus capas irregulares. Además, el largo en la parte trasera puede equilibrar los ángulos del rostro, como la zona de la mandíbula, los pómulos o la propia nariz.
- Rostros alargados: Las capas más cortas en la parte superior aportan volumen a los lados del rostro, lo que ayuda a acortar visualmente la longitud de la cara. Justo el efecto contrario al que buscan las mujeres con el rostro más redondeado.
- Cabello fino: El shullet es ideal para el cabello fino, ya que las capas añaden volumen y textura, creando la ilusión de más densidad. De hecho, las mueres con cabello fino son las que más lo demandan.
- Cabello grueso o rizado: Si se trabaja con capas adecuadas para controlar el volumen, este corte de pelo, aunque no lo parezca, también puede funcionar muy bien en este tipo de cabellos. Además, le da un toque fresco, juvenil y desenfadado a tu look.
- Cabello liso: Generalemte, suele coincidir el cabello fino y el pelo liso, por lo que para ambos, el shullet es la opción perfecta, ya que las capas del shullet le dan más movimiento y estructura, evitando que el pelo luzca demasiado plano o sin vida.