El corte mullet es una de esas tendencias que vuelve cada cierto tiempo. "Se trata de un look con un aire trasgresor y desenfadado, que casa muy bien con una personalidad un poco rebelde y que además es muy cómodo porque permite no peinarse" nos explica Eduardo Sánchez, director de la Masión Eduardo Sánchez. Es un corte bastante alternativo que comenzó a popularizarse a principios de los años 70 pero muy ligado al glam rock y fundamentalmente a David Bowie, el rey del Glam.
Hasta la décadada de los 90, se trataba de un corte masculino. Pero poco a poco, las mujeres empezaron a adaptarlo a sus looks, hasta convertirlo en una tendencia atemporal. Carlos Fernández, experto de Franck Provost, nos recuerda cuáles son las claves del mullet. “El corte mullet se caracteriza por llevar el cabello corto por la parte delantera incluso con un flequillo corto y la nuca larga. Se trata de un corte muy arriesgado, ideal para quienes quieren dejar de lado las caras de niñas o tienen el rostro ovalado o redondeado”.
Desde la firma Llongueras, Alberto Sanguino afirma que “el mullet favorece a todo tipo de rostros, aunque siempre es preferible en rostros más redondeados porque es un corte que alarga la silueta y da un efecto rectangular. Además, es súper versátil ya que lo puedes adaptar a cualquier tipo de óvalo”.
Kaia Garber ha sido la última en sumarse a esta tendencia, y lo ha hecho por la puerta grande con un mullet con capas invisibles. La hija de Cindy Crawford nos confirma que en materia de cortes de pelo no hay nada escrito, reinventado el peinado del momento en su versión más soft y elegante, y confirmándonos que no existe edad para llevarlo.
Como nos señalan desde Llongueras “Kaia Garber lleva microcapas con volumen. El verdadero mullet con capas invisibles siempre tiene que tener el cabello más largo en la zona de la nuca que el resto. Por otro lado, la zona alta tiene que estar más capeada, para darle ese toque más cañero. Como podemos observar, hay una diferencia de largos entre el largo de la nuca, el largo de las patillas y el largo del frontal, encontrando tres niveles distintos gracias a unas capas muy sutiles”.
Y es que ese tipo de corte, ha vuelto a tener presencia de manera recurrente. "En las últimas temporadas se ha dulcificado yha evolucionado hacia opciones mucho más relajadas, más largos o más cortos pero jugando a favor de la textura del cabello y son incluso aptos (o sobre todo aptos) para melenas rizadas o con ondas, es un corte que, en los últimos tiempos coquetea con el shag o con ciertos tipos de bob más desenfadados como el bob cat” nos cuenta Eduardo Sánchez.