Ahora que llega el buen tiempo, se presenta un pequeño problema: estamos muy blancas. Pasamos a usar prendas más descubiertas como vestidos cortos y usamos tonalidades más vivas y llamativas y sentimos que no estamos igual de favorecidas por la tonalidad pálida de la piel. Y una buena forma de combatir con esto es usando las llamadas gotas autobronceadoras que tan virales se han hecho en los últimos meses.

Aunque es un mito eso de que las pieles más blancas no son bonitas, es cierto que muchas se ven mejor con un tono más alto. Es el llamado efecto buena cara que todas obtenemos cuando nos da ligeramente el sol en la época de verano. Sin embargo, querida lectora, debemos recordarte que el sol es el mayor enemigo de nuestra piel y que es mejor recurrir a otros métodos para poder lucir más morena.

Puedes probar con el maquillaje con unos polvos bronceadores o un stick bronzer para crear ese efecto piel besada por el sol. Pero si lo del makeup no es lo tuyo y buscas algo más sencillo de utilizar, puedes recurrir a los autobronceadores. Si estos te da miedo usarlos y no te ves confiada para darles una oportunidad, te recomendamos probar con el formato en gotas que se mezcla con la crema hidratante.

Cómo usar las gotas bronceadoras para la cara

Y aunque parezca un producto complicado de esos que dejan la piel anaranjada o a parches, lo cierto es que este formato se ha colocado entre los favoritos por lo fáciles que son de usar.

  1. Exfolia tu piel: aunque este es un producto más básico que los bronceadores tradicionales, cuanto más lisa esté la piel, mejor será el resultado.
  2. Limpia e hidrata: antes de aplicar las gotas, asegúrate de que tu piel está limpia y seca y empieza tu rutina de belleza habitual.
  3. Añade unas gotas bronceadoras a tu crema: elige tu crema hidratante favorita y mézclala con unas gotas del producto.
  4. Extiende el producto: exparce toda la mezcla por todas las zonas del rostro. No te olvides de las orejas, el cuello y el inicio del cabello.

Las mejores gotas autobronceadoras