La Navidad significa excedernos en planes que derivan en comidas, cenas y algún que otro plan que se reduce en picar entre horas. Los reencuentros están rodeados de una copa de champán, y dejar la rutina de lado se convierte en nuestro nuevo día a día. Esto significa que la vuelta tendrá que ser un poco más estricta de lo normal si queremos perder todo eso que hemos sumado, sin quemarlo. Por eso, y porque sabemos que ya estás pensando en una dieta que llevar a cabo cuando acaben estas fechas te traemos los mejores consejos para sobrevivir a la Navidad.
La farmacéutica Ester Sansi nos desvela los mejores trucos para no preocuparnos más por esos excesos navideños.
1. Lo que nunca falla es hacer un detox después de las fiestas, aunque si ya prevés excesos, es recomendable empezar cuanto antes y mantenerlo hasta finales de enero. Y es que compensar los excesos es un clásico-básico. Toma alimentos ricos en fibra.
2. Prueba a tomar infusiones, te ayudarán a drenar el efecto del alcohol y los azúcares ingeridos los días festivos. ¿Cuáles escoger?
-Infusiones digestivas con ingredientes como cúrcuma y jengibre.
-Infusiones con hinojo que ayuda a eliminar gases.
-Infusiones diuréticas como cola de caballo o ginko biloba. Este último, además, ayuda a la circulación (muy recomendable después de llevar tacones toda la noche, por ejemplo) y evita la hinchazón. No olvidar que, un aumento de la circulación es sinónimo de aceleración del metabolismo.
- Infusiones de cardo mariano y vara de oro si buscamos una acción detox
- Infusiones de té verde, guaraná y jengibre para una acción anticelulítica.
3. Deja de lado las grasas y empieza a seguir una dieta basada en las verduras y hortalizas. Tienden a no comerse durante las fiestas y vienen muy bien para regular y eliminar excesos.
4. Intenta hacer 2 o 3 comidas al día rica en frutas, verduras y alimentos saciantes.
5. Recuerda beber gran cantidad de agua, que, además, ayuda a mejorar las digestiones y a evitar la acidez. Recomiendo añadir también limón.
6. Si durante las fiestas no has hecho nada, es importante retomar las rutinas. Por ejemplo, empezar el día haciendo ejercicio mediante tablas, correr, usar las escaleras en vez del ascensor o caminar en vez de ir en coche. Y luego vuelve al gimnasio. O si quieres empezar haciendo deporte, de verdad, comienza en el gimnasio poco a poco.