10 flequillos largos rejuvenecedores que favorecen mucho, se llevan y quitan años de inmediato
Descubre qué tipos de flequillos largos se han puesto de moda porque sientan bien a cualquier edad y rejuvenecen muchísimo
Actualizado a 16 de junio de 2024, 18:30
Empezar a llevar flequillo es una decisión de valientes y personalidades decididas, porque cuando lo haces ya no hay vuelta atrás, y a pesar de que el pelo crece, nadie nos quita esos meses de arrepentimiento en los que nos preguntamos en qué narices estábamos pensando o en los que debatimos internamente si tomamos la decisión correcta. No obstante, hay pasos a medio camino que pueden darte lo mejor de los dos mundos: los flequillos largos.
Se han puesto de moda (aunque nunca han desaparecido realmente). Por flequillos largos nos referimos al icónico flequillo cortina de Heidi Klum, Sara Sálamo, Selena Gómez o al primer flequillo de Aitana de OT. Sí, esos que inspiraron a los cambios ultrafavorecedores con flequillos largos de Ariadne Artiles, Blanca Suárez, Lily Collins o Ana de Armas (entre muchas otras).
Eso es lo que nos lleva a pensar ¿por qué no? Para ello, hablamos con los mejores expertos para darte la guía completa (y todas las claves) para saber cuál es el flequillo largo que más te favorece y los más virales por los que suspirarás.
¿Qué flequillo te hace ver más joven?
Algo muy importante que nos recuerda Alberto Sanguino, Education Manager de Llongueras es que los flequillos aportan un toque de frescura a nuestro look. “Cuando creas un flequillo, enmarcas el rostro. Hay tantos flequillos como tipos de ‘marcos’”.
No obstante, señala uno por su poder de rejuvenecer hasta casi diez años, el baby bang. “Es ese que está por encima de las cejas, muy desigual, desfilado y que da un aire muy natural, como si se hubiera trabajado poco, más casual”.
¿Y ya está? No, cualquiera que quede por encima de la ceja, rejuvenece. La clave está en no hacer un flequillo a la altura de los ojos, puesto que pueden entristecer tu expresión facial.
Cómo saber si te queda bien el flequillo
¿Te lo has preguntado alguna vez? Porque yo no paro de hacerlo, y la situación de todas mis amigas es la misma. Si necesitas simbolizar un cambio en tu vida, generalmente empezarás por un cambio de look, y uno radical incluye flequillo si no lo tienes.
Ahora bien, un flequillo cambia mucho tu expresión, por lo que es normal que pienses que quizás no pueda quedarte bien. Pues has de saber que, tal y como nos cuenta Elías Pedrosa, director creativo de Oculto Hair Club, “a todo tipo de rostro le queda bien el flequillo. Solo tienes que saber cuál es el tuyo”. Algo en lo que coincide Sanguino al recordarnos que “todo dependerá del óvalo de su rostro y se valorará un tipo de flequillo u otro”.
Además, conviene recordar que los óvalos alargados son los más fáciles, ya que lo que tienen que cubrir es toda la zona de la frente. Entonces, “todos los flequillos que estén en su caída natural, rectos y a la altura de las cejas, le van bien a este tipo de óvalos”, opina el Education Manager.
¿Y qué pasa con los rostros redondos? Ese es el que más debería evitar los flequillos, aunque no tiene por qué prescindir de ellos. “Le interesan más los flequillos estrechos, es decir, aquellos que son a la altura de las cejas y tupidos”. Oculto Hair Club nos da el ejemplo perfecto: el flequillo cortina con apertura en el centro o incluso lateral. “Nos va a dar un aspecto de menos redondez facial”.
En qué casos evitar el flequillo
Lo primero, evítalo si no estás segura. Porque si no estás segura (y por mucho que el pelo crezca), lo mejor es no arriesgarse. Por otro lado, ambos expertos coinciden en que seas bastante consecuente y coherente con tu estilo de vida. Es decir, si te molesta el pelo en la cara, eres deportista o atleta o sudas mucho, tampoco es nada recomendable.
Por qué llevar un flequillo largo
Para empezar, porque son menos radicales. Sanguino es claro: “los flequillos largos tienen una parte buena, que es que enseguida puedes abrirlo o ladearlo para que no te moleste; o incluso puedas retirarlo con alguna horquilla si no quieres tener sensación de flequillo a diario”. Sin duda, es una clara ventaja frente a otro tipo de flequillos. Además:
- Son más versátiles.
- Suavizan rasgos faciales fuertes, como una mandíbula prominente o una frente ancha. Al final, te ayudarán a crear un marco más armonioso para el rostro.
- No necesitan tantos retoques. A diferencia de un flequillo corto, un flequillo largo no necesita recortes tan frecuentes para mantener su forma.
- Quedan bien en todo tipo de rostros (y son 100% personalizables). Aunque para eso tendrás que encontrar un buen estilista y, lo que es más importante, confiar en él.
- Se prestan a un cambio sutil. Si buscas un cambio en tu apariencia sin hacer una transformación drástica, un flequillo largo puede ser la opción perfecta.
- Son muy elegantes, sofisticados y quedan genial en cualquier tipo de recogido, ya sea de invitada o en tu día a día.
- Te hará parecer más joven, ya que ese es su objetivo: añadir un toque juvenil y fresco a tu estilo, dando como resultado una imagen más relajada y moderna.
Cómo cuidar un flequillo largo
Algo en que coinciden ambos expertos es que es de vital importancia encontrar un buen estilista que te asesore. Además:
- Como el flequillo está en contacto constante con la frente, puede volverse grasoso rápidamente. Lávalo con más frecuencia que el resto del cabello si es necesario. Incluso puedes lavar solo el flequillo entre lavados completos.
- Después de lavarlo, sécalo inmediatamente con un secador para evitar que se seque de forma desigual o se vuelva plano. Usa un cepillo redondo para darle forma y volumen.
- Para mantener su forma y evitar que crezca demasiado, recorta tu flequillo cada 4-6 semanas. Si no puedes ir al estilista con frecuencia, aprende a hacer pequeños recortes tú misma. Aunque te recomendamos encarecidamente que vayas a tu peluquero para evitar disgustos.
- Ni muchos productos, ni pocos. Para tu flequillo, usa productos ligeros para el cabello, como un spray texturizante o un poco de mousse, para mantener el volumen sin que el flequillo se vea grasoso o pesado. Por otro lado, evita productos tipo aceites y cremas fuera de tu flequillo para evitar que se engrase rápidamente.
- Controla el encrespamiento. ¿Cómo? Con sérums antifrizz que uses con moderación y con tu plancha de cabello habitual. Eso sí, no te olvides de aplicar protector térmico.
- A la hora del skincare, evita la frente o usa productos no comedogénicos para prevenir que el flequillo se engrase. En cuanto al maquillaje, si aplicas base, opta por productos ligeros y de acabado mate para evitar transferencias al flequillo.
- Cuídalo a diario. Es decir, peina tu flequillo todos los días para mantener su forma y eliminar cualquier residuo acumulado durante la noche; usa un cepillo redondo pequeño al secarlo para darle una ligera curva y volumen.
- Por la noche, puedes usar una diadema o pinzas suaves para mantener tu flequillo apartado del rostro y evitar que se aplaste mientras duermes.
- Somos lo que comemos. Una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales como la biotina, vitamina E y ácidos grasos omega-3 puede mejorar la salud general de tu cabello, incluyendo el flequillo.
- Ten en cuenta el clima. En climas húmedos, usa productos que controlen el frizz y mantengan el volumen; y en climas secos, hidrata tu cabello regularmente para evitar que se vuelva quebradizo.
10 flequillos largos virales que sientan bien a todas
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