Muchas han sido las polémicas a las que ha tenido que enfrentarse Yaiza Martín (43 años) en el plató de ‘Viernes Deluxe’. La canaria, tras su expulsión disciplinaria en ‘Supervivientes 2023’, ha querido dar sus explicaciones de todo lo que se ha estado hablando mientras se encontraba en Honduras. Además, se ha negado a coincidir en el plató con Miriam Corregüela, la hija de su novio Ginés (52 años).
Yaiza, antes de ‘Supervivientes 2023’
Desde antes de convertirse en concursante del programa de supervivencia, Yaiza ya daba mucho que hablar. Sus continuos enfrentamientos con la hija de su pareja era una constante en todos los platós a los que acudían una y otra. Pero el conflicto tomó especial relevancia cuando Isabel y su hija decidieron ir de visita a Honduras para darle una sorpresa a Ginés y aclarar su situación sentimental.
Por aquel entonces, el tiktoker le pidió una segunda oportunidad a su mujer y dejó la relación que tenía con la canaria en directo. Aunque esta situación duró poco, ya que días después, era Yaiza la que iba de visita para tener una conversación con el que hasta aquel entonces era su ex. Ambos se reconciliaron y ella se convertía en concursante oficial del reality, tras el abandono por cuestiones médicas de Gema Aldón.
Conflicto entre Yaiza y Miriam
La guerra televisada que inició la hija del jienense no parecía tener fin. Llegaron multitud de platós dando su opinión sobre el concurso tanto de su padre como de su pareja. Incluso en algunas ocasiones llegó a insultarla y a pedir su expulsión. Aunque esto no tardó mucho en hacerse realidad, ya que la organización decidía que abandonase de manera disciplinaria ante la actitud que mostraba con sus compañeros.
En la noche del viernes tenían la oportunidad de decirse cara a cara lo que pensaban la una de la otra. Pero Yaiza ha sido muy contundente al decir: “Si entra, me levanto y me voy”.Jorge Javier Vázquez (52 años) ha querido parar la amenaza para que pudiera dar sus explicaciones que, a fin de cuentas, era lo que todos estábamos esperando. Por ello, no ha habido un cara a cara, sino que han tenido que dirigirse la palabra desde distintas salas del plató.
Yaiza ataca a Miriam
“Lo único que habló bien fue cuando se tiró del helicóptero”, empezaba la canaria haciendo referencia a la poca empatía que ha mostrado Miriam con su padre. Y a partir de ahí un sinfín de reproches, entre los cuales la hija del agricultor le pedía “lealtad y dignidad”. Ante esto, la superviviente ha espetado que “no la conozco de nada”, alegando que no tiene por qué emitir juicios de valor ni juzgarla.
“Sé muchas cosas de la familia de Ginés pero me las callo hasta que él termine el concurso”, añadía. Y continuaba diciendo que “a un padre no se le insulta, con todo lo que me ha hecho mi madre y no la he insultado”, señalaba en relación a las palabras malsonantes que le dedicó Miriam a su padre, a pesar de haberlas dicho para defender a su madre como ella misma ha declarado.
Además, Yaiza alude a una situación en la que estuvieron presentes ambas. Le recrimina que “tú fuiste protagonista y fuiste testigo, le dijiste a tus padres que lo mejor que hacían era separarse”. Y, sin dejar que la joven pudiera expresarse, le decía que “tú y tu madre hiciste una exclusiva insultando a tu padre”, avivando aún más la polémica entre las dos.
La relación delicada con su madre
Otro tema que tenía pendiente era la relación, aunque inexistente, que tenía con su madre. Le han puesto las famosas imágenes donde la madre reniega de su hija e indica que no quiere saber nada de ella. La novia de Ginés se ha mostrado sorprendida: “Si ha sido sorpresa que apareciera mi madre pero porque tiene mucho que callar. Lo que más pena me da es que le puedo responder todavía peor”, argumentaba.
Pero también ha querido mostrar otra faceta de ella. “Es duro porque al final que una madre hable así, me da pena, me da vergüenza pero también tengo que decirte que gracias, porque ahora sí que no me voy a callar”, expresaba en un tono de resignación a la vez que de alivio para tener vía libre de contar lo que le venga en gana.
De hecho, ha habido momentos en los que ha recordado las palizas que le propinaba su progenitora. “Si me he guardado este silencio toda mi vida es porque es la madre que me parió, no es porque no tenga pruebas de las palizas”, acusaba. En cualquier caso, la canaria sigue teniendo muchas cuentas pendientes que tendrá la oportunidad de ir aclarando conforme vaya pasando el tiempo.