Desde el 31 de julio, la vida de Violeta Mangriñán ha cambiado para siempre. La llegada de Gala al mundo ha sido lo mejor que le ha pasado a la influencer y, a pesar de la felicidad de haberse convertido en mamá primeriza, la realidad es que la novia de Fabio Colloricchio no ha dudado en contar la verdad de todo lo que está viviendo en el posparto y la situación tan críticas que está atravesandopor culpa de los cólicos que está sufriendo la recién nacida, por la que le es imposible conciliar el sueño: "He probado TODO pero no hay forma de calmarla, espero que con el baño se relaje, estando sola en casa y con mis hormonas aún tan inestables, me siento más débil, sensible y vulnerable pero trato de hacerlo lo mejor posible. Nadie nace enseñado", comentaba muy agotada Violeta a través de Instagram, red social en la que también ha querido volver a presumir de su cuerpo, exponiendo nuevamente su peso actual a punto de cumplirse un mes del parto.
El cuerpo de Violeta Mangriñán ha experimentado grandes cambios durante los últimos nueve meses. La de Valencia confirmó que había cogido 12,5 kilos y ya ha perdido 8,5, tan solo le quedan 4 para recuperar su peso ideal. Eso sí, no le preocupa lo más mínimo ya que en septiembre volverá a retomar su rutina en el gimnasio.
"Para las que me preguntáis cómo me he quitado la tripa en tan solo 21 días... Aún queda un pelín de 'huevo' y 4 kilos de postembarazo en mi cuerpo. Milagros, a Lourdes. Hace tan solo tres semanas que di a luz pero es verdad que me estoy recuperando bastante rápido y que los kilos de más no me sientan mal. Ya tendré tiempo de perderlos cuando vuelva a la rutina de deporte", ha contado por Instagram orgullosa de su figura.
Además, también ha querido desvelar la manía que se le ha quedado tras el embarazo y que es muy notable en sus últimos posados: "La mano en la tripa no es porque esté tapando nada, es porque después del embarazo se me ha quedado este gesto de tocarme la tripa de forma inconsciente".