Hacer frente a una muerte no es fácil. Dos es un varapalo inimaginable. Y tres es un escenario terrorífico que pocas personas viven. Al menos en tan poco tiempo como lo ha hecho la familia Goyanes-Lapique. El pasado 7 de agosto, Carlos Goyanes fallecía mientras dormía en su casa de Marbella. Días más tarde, su hermano Tito seguía su camino. Y hace una semana, Caritina Goyanes nos dejaba, de manera inesperada, por lo que parece ser un infarto. Tres pérdidas muy duras y seguidas que ha hecho que el dolor y la pena se instalen en la familia de los fallecidos.
Así lo veíamos en las desgarradoras imágenes del entierro de Caritina, donde Cari Lapique se derrumbaba o donde Antonio Matos, marido de la fallecida, y Carla Goyanes se abrazaban para apoyarse mutuamente. Esta última hacía un homenaje a su hermana en sus redes sociales con una emotiva carta en la que le hacia tres promesas. No era la única. Almudena Goyanes, Inés Domecq o Colate decidían dar su último adiós a su amiga en sus perfiles.
El que se ha mantenido en absoluto silencio desde que Caritina falleció ha sido Antonio Matos. No es de extrañar, ya que el corredor de seguros debe estar totalmente volcado en reajustar su vida sin su esposa, tanto a nivel emocional como de logística vital. Por ejemplo, Matos tiene que criar a sus hijos, a la vez que sigue adelante con su trabajo y valora qué hacer con la empresa de Caritina.
El último gesto público de Antonio Matos con Caritina Goyanes un mes antes de su fallecimiento
Aunque ahora el silencio es su mejor aliado, hace un mes Antonio Matos no dudaba en mostrar sus sentimientos por Caritina. Fue el pasado 26 de julio a través de Instagram. La hija de Carlos y Cari subió una imagen con motivo de su aniversario de bodas. "¡16 años! ¡Y 16000 millones de veces te volvería a elegir para recorrer este camino juntos! Te quiero", expresó Caritina.
La reacción de los amigos y familiares de la pareja no se hicieran esperar, como Isabelle Junot o Naty Abascal que respondían con emoticonos. Antonio, dentro de su actitud reservada, tampoco quiso quedarse atrás. "¡A por los 16 siguientes con más ganas que el primer día!", manifestó Matos. Un deseo que, lamentablemente, no ha podido cumplirse.
La fe de Caritina Goyanes que también comparte su marido, Antonio Matos
Si algo caracterizaba a Caritina Goyanes era su fe. La madre de Pedro y Minicari era profundamente religiosa, "de oración diaria y de vida sacramental frecuente", contaba el padre Carlos López sobre la fe de la hija de Cari Lapique. Ella llegó ahí tras verse "en un punto en el que mi vida iba a toda velocidad, totalmente centrada en el trabajo para no pensar en nada más. Me volví superexigente con mis hijos", confesaba Caritina hace un tiempo.
Un claro ejemplo es que, estuviera en su casa o de vacaciones en Marbella, acudía a misa diariamente. Formó un grupo en San Agustín donde compartir sus inquietudes religiosas y empezó a participar en varios retiros de Emaús. Esta experiencia espiritual no es la única que Caritina llegó a vivir. La hermana de Carla Goyanes asistió a las 'mothers prayers', un grupo de personas que tiene su origen en Inglaterra y que se basa en la promesa de entregar a Dios todo el dolor y las preocupaciones que tenían por sus hijos. Los sentimientos que Caritina ya arrastraba hizo que esta fe le interesara mucho y se internara completamente.