El lunes 24 de abril se volvía negro para el mundo del toreo, que perdía a una de sus figuras más ilustres. En el hospital Gregorio Marañon de Madrid fallecía Sebastián Palomo Linares a los 69 años de edad, y esa misma tarde se disponía para amigos y familiares una sala en el tanatorio de La Paz para que estos pudieran brindarle su último adiós.
Hasta el tanatorio se acercaron con gesto serio algunos compañeros de profesión como Jaime Ostos, muy afectado por la pérdida de su colega, y la doctora Mari Ángeles Grajal, así como la torera Cristina Sánchez o Marta González, exmujer de uno de los hijos de Sebastián.
Sebastián falleció tras no superar una operación cardíaca a la que se enfrentó el pasado viernes. Solo dos días antes ingresaba por su propio pie, y acompañado por la mujer con la que ha compartido los últimos años de su vida y gran amor, Concha Azuara.
La familia cumplirá el deseo del maestro, que escogió para sí la cremación y que sus cenizas reposaran para siempre en su finca de Aranjuez, donde fue más feliz.
Los hijos del actor de ‘Solos los dos’, Sebastián, Miguel y Andrés habían pasado momentos muy complicados con su padre. De hecho, no se hablaban. Tras su intervención quirúrgica ninguno fue a visitarle y la única que no se separó de su lado fue Concha. Pero cuando supieron la gravedad de la situación, corrieron a estar al lado y así poderse despedir, dejando atrás viejas rencillas. Con quien no se les ha visto enterrar el hacha de guerra ha sido con la mujer de su padre. Durante el tanatorio se les ha visto manteniendo una actitud de lo más fría con la jueza Azuara, cada uno ha llorado su pena por su lado.