Una decisión llena de polémica. Según confirmaban desde 'Telemadrid', Carmen Sevilla no tendrá una despedida multitudinaria. La gran estrella será incinerada este miércoles en la más estricta intimidad. Ni capilla ardiente donde puedan acudir los muchos seguidores y amigos de la intérprete, ni un último adiós lleno de todos aquellos que han llorado la muerte de la actriz en estas últimas horas. Así lo habría decidido su hijo Augusto Algueró, siguiendo con la tónica que ha marcado todo este tiempo. Una decisión no exenta de polémica que generará, de nuevo, conflicto entre todos aquellos que quisieron acudir a visitar a la cantante a la residencia en la que se encontraba.
Carmen Sevilla fallecía este pasado martes a los 92 años en un hospital madrileño después un súbito empeoramiento de su salud. Carmen había ingresado en la madrugada del domingo 25 y desde entonces permanecía en cuidados paliativos, hasta que su cuerpo se fue apagando. Finalmente, a eso de las ocho de la tarde del martes 27, exhaló su último suspiro de vida y con ella se fue el icono siempre fue. Uno de los personajes mediáticos más queridos que hoy recibe el último adiós de un público que la adoraba.
El último adiós a Carmen Sevilla
Hacía años que no sabíamos absolutamente nada de Carmen Sevilla. Su hijo Augusto Algueró, su gran protector, quiso protegerla hasta el fin de sus días. La artista estaba enferma y su Alzheimer le impedía recordar quién fue o las personas de su alrededor. Esto fue muy doloroso, pero el músico tomó la decisión de restringir al máximo las visitas que recibía su progenitora. Solo se las permitía a Moncho Ferrer, su gran amigo. No quería que un ir y venir de antiguos compañeros de profesión de Carmen la aturdiera aún más, y, por supuesto, tampoco quería tener que ver a esas personas hablando de su madre en los medios, dando la última hora sobre ella. Solo él tenía potestad para ofrecer información referente a la mujer que le dio la vida. Y, eso, fue algo que no todos supieron entender.
Ahora, el público que tanto la quiso tampoco podrá despedirse de ella. Son muchos los rostros anónimos y conocidos que a lo largo de los últimos años se han interesado por la salud de Carmen pero que no podrán despedir sus exequias. Su hijo Augusto preservaba la imagen de su madre hasta las últimas consecuencias. Algo que también ha decidido hacer ahora tras su fallecimiento. Los restos mortales de la actriz han sido trasladados al tanatorio de Pozuelo de Alcorcón, en Madrid, donde serán incinerados este mismo miércoles. Ni despedida multitudinaria ni una capilla ardiente para una de las actrices y cantantes más queridas de nuestro país. "España se tendrá que despedir de Carmen de un modo más simbólico", ha dicho su gran amigo Moncho Ferrer en conversación con 'El programa de Ana Rosa', respetando, hasta el final, la decisión del hijo de la artista.
El comunicado de Augusto Algueró jr. a los medios
"Quiero agradecer la dedicación y la profesionalidad del equipo médico que ha estado tratando a mi madre en la Fundación Jiménez Díaz y a la Dirección y todo el personal que la ha cuidado durante sus últimos años en la residencia Orpea Aravaca", ha comenzado diciendo Augusto, aplaudiendo el buen trabajo de los profesionales de la salud que han velado por la salud de su progenitora. "También quiero agradecer enormemente a todas y todos los amigos, compañeras y compañeros de profesión, público y profesionales de los medios de comunicación, el interés y la preocupación que habéis mostrado hacia mi madre en todo momento. Ahora ha llegado el final y nos toca despedirnos de ella. Lo haremos de una manera estrictamente íntima y familiar. Sé que vais a respetar nuestra voluntad, tal y como habéis hecho hasta el momento. Agradecemos muchísimo vuestra comprensión y todo vuestro cariño", termina diciendo en este comunicado, cien por cien respetuoso con la manera de entender el fin de Carmen Sevilla.