El mundo de la música llora la inesperada muerte de Sinéad O'Connor a los 56 años. La cantante irlandesa, que se hizo muy popular en la década de los 90, tuvo una vida tremendamente complicada. Malos tratos, escándalos, problemas de salud mental y tragedias marcaron su vida personal y profesional. Hoy, hemos podido descubrir cuáles fueron las últimas palabras de la intérprete, que algunos han interpretado como una premonición de lo que estaba por llegar.
Sinéad, o Shuhada' Sadaqat el nombre que adoptó en 2018 cuando se convirtió al Islam, se expresaba sin pudor en sus redes sociales y en los días previos a su fallecimiento dejo varios mensajes que transmitían que la cantante tenía el corazón roto. El último de ellos fue una respuesta a una imagen de Twitter, que retaba a quien la leyera a contar cómo estaba yendo su vida con emojis.
La intérprete de 'Nothing compares 2 U' respondía con unas desgarradoras palabras y una dura imagen. Sinéad subió una foto en la que abrazaba a su hijo, que acompañó con muchos emoticonos llorando. O'Connor estaba triste, desolada, y quiso explicar por qué. "Llevo viviendo como una criatura no viviente de la noche desde...", expresó Sinéad.
No hacía falta completar esos puntos suspensivos porque por todos era conocida la terrible tragedia que la artista vivió hace unos meses. Shane, uno de sus cuatro hijos, se suicidó con tan solo 17 años hace muy poco tiempo. Algo que marcó para siempre a O'Connor, que quería con devoción a su hijo. "Él era el amor de mi vida, la luz de mi alma. Éramos un alma en dos mitades. Él fue la única persona que alguna vez me amó incondicionalmente. Estoy perdida en el bardo sin él”, confesó, totalmente destrozada.
Esa referencia al bardo, que viene de varias escuelas del budismo y la cultura tibetana, se refiere a un estado de existencia intermedia o de transición entre dos etapas. ¿El más conocido? El que se encuentra entre la muerte y la reencarnación. Para la tradición cristiana sería algo así, como el purgatorio.
Además de este doloroso mensaje, Sinéad también compartió varias canciones que podían aliviar o acompañar a madres que estaban viviendo la misma situación que ella. Alguno de los temas eran "How can you mend a broken heart" de Al Green o un mantra tibetano.
La complicada vida de Sinéad O'Connor
La cantante tuvo una trágica infancia en la que su madre abusaba física y sexualmente de ella. Además con apenas 15 años fue ingresada en un correccional, el Magdalene Asylum, debido a su absentismo escolar y tras varios pequeños hurtos. Allí es donde se dio cuenta de que la música era su pasión gracias a una monja que le compró una guitarra y vio su talento, tanto para pagarle unas clases. Desde un edad temprana todo el mundo sabía que O'Connor sería alguien en el panorama musical. De hecho, tras dejar el colegio grabó una maqueta de cuatro canciones y formó la banda Ton Ton Macoute.
La carrera de O'Connor dio un paso hacia delante después de que comenzara a trabajar con la que fuera directora discográfica de U2, Fachtna O'Ceallaigh, y encontrara entonces un éxito temprano con el lanzamiento en 1987 de su álbum debut 'The Lion and the Cobra', lo que le valió una nominación al Grammy a la mejor interpretación vocal femenina de rock. Sin que las causas de la muerte se hayan revelado todavía, el comunicado revela que los seres queridos de la cantante están realmente apenados por la noticia. "Con gran tristeza anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Sinéad. Su familia y amigos están devastados y han solicitado privacidad en este momento tan difícil", relatan.
Diagnosticada en 2003 con varias enfermedades mentales, entre las que se encuentran depresión severa y trastorno bipolar, la artista ha sido siempre noticia por sus numerosos intentos de suicidio. De hecho, en 2015 llegó a cancelar una de sus giras por uno de estos brotes mentales cuando sufrió una sobredosis. Con la relación con su familia rota, su círculo cercano denunciaron su desaparición pero poco después la encontraron en un hotel de Chicago. Además, en 2017 subió a sus redes sociales un preocupante vídeo desde una habitación de New Jersey en la que estaba totalmente destrozada, llorando y seguramente medicada porque su mirada estaba perdida.
O'Connor, que habló abiertamente sobre su lucha de décadas con la enfermedad mental, escribió en su página de Facebook a principios de este mes que se había mudado a Londres después de 23 años y estaba terminando un álbum que se lanzará el próximo año. Pero no solo eso, la cantante también compartió sus planes para hacer una gira por Australia y Nueva Zelanda en 2024, y en Europa, Estados Unidos y otros territorios en 2025, por lo que la noticia ha sorprendido a todos sus seguidores.
Devastada tras el suicidio de su hijo
Tan solo una semana después de que su hijo se quitara la vida, la cantante tuvo que ser hospitalizada. Sinead, en cuya carrera destacan 'Mandinka' o 'Thank You For Hearing Me', fue quien anunció entonces que estaba dirigiéndose a un centro sanitario acompañada de la policía tras compartir horas antes de forma pública unos mensajes en los que se echaba la culpa del fallecimiento del joven y reconocía que barajaba la posibilidad de suicidarse: "Estoy perdida sin mi hijo y me odio a mí misma. El hospital ayudará un tiempo. Pero voy a encontrar a Shane. Esto es solo una demora".
Era muy común que la artista preocupara a sus seguidores con frases como que había ayudado a destruir a su familia y lamentaba continuamente que sus hijos (fruto de sus relaciones con Donal Reynolds, el periodista John Waters y el empresario Frank Bonadio) no querían tener mucha relación con ella. "Todo lo que toco, lo arruino. Solo me quedé por él. Y ahora se ha ido", dijo Sinead, que dijo adiós a su hijo en un funeral hindú siguiendo de este modo los deseos del joven.