La noche comenzaba a las mil maravillas. Pablo Motos daba la bienvenida a la invitada, Toni Acosta, y junto a ella comenzaba a realizar una entrevista de los más distendida y animada. No obstante, la actriz canaria hacía mucho que visitaba el plató de 'El Hormiguero' y estaba contentísima por haber vuelto. "Yo creo que hace más de dos años que no nos veíamos", le ha dicho a Pablo nada más comenzar. Además, el presentador ha tenido un gesto precioso con ella cuando le ha preguntado si quería que saludaran y mandaran un beso a sus hijos, que seguro la estaban viendo. Algo que han hecho y que seguro ha encantado a Nicolás y Julia, los pequeños de la intérprete. Sin embargo, el final de la noche nos dejó con un sabor muy amargo. Y a Pablo Motos más todavía.
Todo sucedía cuando daba comienzo la última parte del programa en la que 'El Hormiguero' planeaba entregar la tarjeta OpenBank con 3.000 euros a la persona que primero consiguiese llamar al número de teléfono que iba a aparecer en pantalla. Algo que siempre se ha llevado a cabo sin problemas. ¡Hasta hoy! Tras desvelar el número y quitar el 'modo avión' en el que se encontraba el dispositivo para que nadie pudiese llamar antes, el teléfono móvil no sonaba. ¿No había llamado nadie?
Entonces fue cuando Pablo pidió la ayuda de un técnico para saber si es que él no había sabido quitar de forma correcta el 'modo avión'. Un miembro del equipo se acercó para ayudarle pero este tampoco conseguía solucionar el problema y el teléfono móvil seguía sin sonar. ¿Se habrían colapsado las líneas? Tras unos minutos, el presentador reconocía que no podían seguir esperando más y pedía perdón por lo sucedido. Eso sí, en el próximo programa estos 3.000 euros que no se han dado se acumularan en la siguiente tarjeta. ¡Cosas del directo!