Cada uno tenemos un rol en nuestras familias. A Gloria Camila le ha tocado el de conciliadora en los Ortega Mohedano. La joven actúa de mediadora entre su hermano, José Fernando, y su padre, José Ortega Cano. Ha sido ella la encargada de recoger a su hermano donde ahora vive, en Arcos de la Frontera, y llevarlo en coche a Rota, el lugar en el que veranea toda la familia. Necesitaban hablar después de que hubiera admitido por televisión que había recaído en sus adicciones y que será padre el invierno que viene.
Aunque la familia no quiere hacer declaraciones al respecto, podemos esperar que tras lo hablado el pasado fin de semana, las relaciones van por buen camino. Gloria se acercó el sábado a Arcos y allí subió a su coche su hermano mayor. Condujeron hasta Costa Ballena, donde les esperaba el diestro, que debe estar pasando sus vacaciones más complicadas.
En ningún momento se vio a Michu, pareja de José Fernando, y la madre del hijo que esperan. La familia deseaba tener un encuentro a solas con Josefer, y María, como se llama en realidad, no estaba invitada. Ni los Ortega ni los Mohedano ocultan su malestar con ella, y no dudan en tacharla de aprovechada y de mala influencia.
Al llegar a Rota, José y Josefer acudieron a un hotel donde pudieron tener una conversación tranquila, tal y como han detallado en ‘El programa del verano’. Se pudo ver a padre e hijo paseando y charlando, y después se les unieron Gloria y su novio Kiko.
Los deseos de la familia pasan, primero de todo, por que el joven se cure. Él ha admitido que desea “salir de esa adicción que le complica a uno la vida”, como contó al periodista Pepe del Real. Josefer debería volver a Madrid e ingresar en la clínica López Ibor, donde mejor lo han tratado. Según el programa, la idea sería que él viajara solo a la capital. Unos planes en los que no estaría incluida Michu. Solo tras haberse recuperado del todo le permitirían regresar al lado de su novia. Una condición que habrá que esperar si futuro padre está dispuesto a cumplirla.