Como le sucede a muchas madres, los primeros meses de los bebés son una autentica tortura. Primero, que han de comer cada dos horas y media, después, que pueden tener calor, o frío... hasta que llega el momento en que comienzan a salirles los dientes. Una de las peores etapas, por dolorosas, para los peques, que les hace llorar sin consuelo.