Solo 24 horas después de su operación de vista, Toñi Moreno no puede estar más entusiasmada con el resultado. Pese al temor que toda cirugía implica, la presentadora está decidida a vivir su segunda juventud un año después de convertirse en mamá. Armada de valor, Toñi se ha puesto en manos de los mejores médicos para acabar, de una vez por todas, con la miopía. Y el resultado no puede haber sido mejor.