Bravo, Bertín Osborne, lo has vuelto a hacer. Sabemos que no tiene mérito, que a ti te sale natural, que no le pones empeño alguno, pero aún así nos dejas estupefactos. ¿Cómo es posible que con una simple frase puedas hacer sentir mal a tantas personas? El primero, a tu invitado, y segundo, todas las mujeres que ven tu programa, ‘Mi casa es la tuya’, esas que compran tus discos o van a tus conciertos. ¡Menuda habilidad!
Albert Rivera fue el último invitado de su programa, pero no acudió solo, a comer también había sido convidado Miguel Poveda, una de las voces clave del flamenco actual. Y fue con él con quien metió la pata hasta el fondo.
Bertín presume de naturalidad, de ser un tipo espontáneo y campechano, como el rey emérito (¡ay!)… y de eso se vale para hacer esta clase de comentarios, que podrían venir motivados por una sencilla razón: no se prepara las entrevistas. Eso es lo que hemos pensado todos después de escuchar lo que soltó al catalán.
Llegaba el momento que más gracia le hace a Bertín: cocinar. Porque los hombres entre fogones resultan hilarantes. El de las rancheras tendía un delantal a Poveda para que no se manchara y después le recomendaba que lo reutilizara de la siguiente manera “te lo puedes llevar de recuerdo porque tiene mucha gracia, y se lo regalas a novia, a tu madre…”. Veamos, ¡hay tantas cosas mal en esa frase! Punto uno, el más llamativo de todos: solo nombra a mujeres. No concibe que Miguel cocine. Las cazuelas son para ellas. ‘Sus labores’. En el mundo de Bertín ellas guisan y ellos se ponen el delantal porque está gracioso. Sí, vamos, aquí estamos unas cuantas tronchándonos ahora mismo. Lo segundo: “para tu novia”. Últimas noticias, Bertín ¡Poveda tiene novio! Con ‘O’ final. Él ha hablado de su orientación sexual, y la última ha sido en Cuatro. Cadena de tu mismo grupo.
A esto último nos referíamos con que Osborne pareciera improvisar las entrevistas. Bueno, a eso y a este comentario que también lanzó. ¡Machote, estuviste ‘sembrao’! “Las familias están cambiando demasiado", dijo el de Jerez, eso sí, al menos antes de que el cantaor estuviera presente. Un detalle, eh. Porque sí, querido Bertín, tu siguiente invitado es padre soltero. Ha conformado una familia de esas que "cambian demasiado". Y lo ha podido ser gracias a la gestación subrogada, esa misma que también defendía Albert Rivera, con el que estabas charlando animadamente a pelo, sin parecer haberte interesado por lo que realmente defiende.
Está claro que en el programa todo aquello que no va guionizado, las ‘morcillas’ cosecha de Bertín, consiguen que se nos atraganten a todos, a invitados y a espectadores.