Todos los detalles del impresionante y original anillo de compromiso de Tamara Falcó: diseño abierto y diamantes

¡Se casan! Después de semanas de rumores, Tamara Falcó ha anunciado por todo lo alto su compromiso con Íñigo Onieva. "Soy muy feliz, en eso se resume...", era el título que elegía la socialité para una imagen en la que la pareja se funde en un romántico beso mientras Tamara presume de impresionante (y original) anillo. Una sortija de moderno diseño abierto compuesta por tres diamantes en forma de lágrima que rodean su dedo anular de una forma muy elegante y que encaja a la perfección con el estilo sofisticado de la marquesa de Griñón.

Se trata de una pieza exclusiva de la que por el momento no ha trascendido el origen y que refleja, según ella "una locura de amor". Fue el propio Íñigo el encargado de elegirlo y a juzgar por la reacción de Tamara, ha sido un acierto absoluto.

Tamara Falcó anuncia que se casa con Íñigo Onieva

"Escribo AMOR en mayúsculas porque se lo merece y esa felicidad que describo, es el resultado de ese respeto, cariño y admiración que tenemos el uno por el otro y que hemos compartido en estos dos años de noviazgo", sigue Tamara Falcó en un texto que se ha convertido en declaración de amor en toda regla. "Gracias, por proponerme ser tu compañera de por vida. Me siento la mujer más afortunada del planeta y el sí que te di te lo repito y te lo dejo por escrito para que no se te olvide jamás. Te quiero".

La reacción del flamante novio no se hacía esperar. Aunque Íñigo siempre ha sido mucho más hermético a la hora de declarar su amor públicamente a la hija de Isabel Preysler, el momento lo requería: "Mi amor, gracias a ti por hacerme el hombre mas afortunado al tener de compañera de vida a la persona mas pura, divertida y llena de amor del planeta! Te quiero".

Una boda por todo lo alto

Por el momento, la pareja no ha dado más detalles sobre la fecha y donde tendrá lugar la que será, sin duda alguna, la boda del año. Hace algo más de un año, la propia Tamara hablaba en 'El Hormiguero' de cómo sería la boda de sus sueños: "No creo que la hiciese gigantesca. Mi padre me contó que en su primera boda seguía saludando a gente al final de la noche. Fueron 1.000 personas y eso sí que me parecería una pesadilla", decía la Marquesa de Griñón. Y, ¿quiénes serán los invitados? Tamara lo tiene claro. Además de su familia, en ese día le gustaría estar rodeada de "la gente que más quieres y con los que te lo pasas fenomenal".