Tamara Gorro está pasando por su peor momento. Desde que anunció su ruptura con Ezequiel Garay, son pocas las apariciones que ha hecho.La ‘influencer’ se ha tomado un tiempo para ella misma y aunque sigue pendiente de su familia virtual, aseguró que hasta este martes 18 de enero que es su cumpleaños, iba a centrarse en seguir recuperándose. Pero esta tarde ha sucedido algo que ha perturbado una vez más su tranquilidad y ha dado un paso al frente que jamás le hubiera gustado dar. Tamara, muy afectada y entre lágrimas, ha entrado en directo en ‘Viva la Vida’ y ha compartido unos stories para pedir respeto y para mostrar su enfado por las últimas acusaciones hacia su exmarido. Una persona que ha hablado en 'Viva la Vida' ha asegurado que Ezequiel Garay "tiene costumbres que a ella no le gustan. Él no trabaja y hace cosas que no, hace cosas como jugar a la Play, estar en con la tele... Por la mañana, la noche, no le gustaba mucho todo que jugara a la Play, se pasaba las noches jugando".
Tamara Gorro ha llamado por teléfono al programa presentado por Sandra Barneda y se ha mostrado muy dolida por las personas que intentan tirar por tierra a Ezequiel Garay. La ‘influencer’, entre lágrimas y visiblemente nerviosa, ha dicho que respeta el trabajo de los medios de comunicación pero que en cuanto a otras personas que hablan de su relación, no ve justo que sigan diciendo cosas. “Por favor, estoy enferma”, ha recordado Tamara, que una vez más ha visibilizado sus problemas de salud mental con total naturalidad. A partir de ahí, ha hecho una férrea defensa del padre de sus hijos al comentar que “todo eso es mentira. Somos familiares. En mi casa viven mi marido, mis hijos, mis amigos, mi familia, mis suegros y yo. Estoy enferma. No os lo digo a vosotros, lo digo para las personas que se quieren subir a un carro. Yo estoy enferma y me quiero cuidar. Lo pido por favor a la gentuza que se quiere subir al carro…”, ha comentado desesperada.
Minutos más tarde ha compartido unos stories en los que se ha reiterado. Llorando, angustiada y nerviosa, ha pedido que por favor “basta ya”. Y ha hecho hincapié en que “no puedo más, estoy enferma y me está costando mucho todo”. Una vez más, incluso en este momento de malestar, ha hecho gala de su amabilidad y comprensión y ha comentado que “quiero dejar claro como he dicho que he atendido a todo el mundo. Lo seguiré haciendo. No juzgo ni voy a malmeter. Pero la gente que se está subiendo al carro y mintiendo y dejando a Ezequiel mal, no lo puedo tolerar. No puedo más”. Desesperada, ha dicho que “intento salir pero joder, es imposible con gente así. Creo que soy una persona normal y digo todo como pienso pero no puedo más, por favor”.