Tamara Falcó (41 años) se ha convertido en la auténtica heredera de Isabel Preysler (71 años). Las dos se han convertido, por sus respectivas historias de amor y desamor, en las protagonistas absolutas del 2022 y lo siguen siendo. Al mismo tiempo que la reina de corazones decidía romper su relación con Mario Vargas Llosa (86 años) después de ocho años juntos, Tamara se lanzaba a darle una segunda oportunidad a Íñigo Onieva (33 años). De todo esto (y más) ha hablado la marquesa de Griñón en su última entrevista para la revista Harpers Bazaar.
Por primera vez, Tamara ha hablado de la separación de su madre con "tío Mario", como se dirigía al Premio Nobel de manera cariñosa. "Claro que me da pena la ruptura de Mario con mami… Él siempre ha sido muy amable y cariñoso con nosotras", contaba visiblemente apenada por la situación incorporando también a su hermana Ana Boyer. Sin embargo, no ha querido entrar en los motivos, ni en cómo fue su despedida con el escritor: "La decisión es de mi madre y de él", explicaba. Sea como fuere, el único deseo de Tamara es que su madre esté bien y, a punto de cumplir un mes de la ruptura, confiesa que la ve "en paz y serena".
La conversación definitiva entre Tamara Falcó e Isabel Preysler por Íñigo Onieva
Tamara ha contado con suma naturalidad que antes de tomar la decisión definitiva de retomar su relación con Íñigo Onieva mantuvo una sincera conversación con Isabel Preysler. Madre e hija hablaron de infidelidades, algo que lejos de lo que se podía pensar, la socialité jamás hubiera perdonado. "‘Te lo puede volver a hacer, ¿sabes?", le advirtió Isabel por su experiencia a lo largo de la vida. Durante su charla, Tamara le preguntó si ella le dio una oportunidad a Julio Iglesias y la respuesta de la filipina fue tajante: "Me dijo que no", y le explicó el motivo: "Yo tenía el referente de mi madre, que en los 70’, sin haber estudiado una carrera, con tres hijos, su situación era mucho más complicada que la mía. Ella se vio ante la tesitura de vivir un matrimonio bajo el engaño, donde le era infiel su marido y para ella fue un ‘no’ rotundo", cuenta.
Sin embargo, a pesar de los consejos de su madre, Tamara ha decidido apostar por sus sentimientos y por Íñigo Onieva, de quien está profundamente enamorada.
Así era la relación de Tamara Falcó y Mario Vargas Llosa antes de la ruptura
A pesar de ser de mundos muy diferentes, Tamara congenió con Vargas Llosa desde el primer día. "Es un amor, con una disciplina tan férrea... Es una persona llena de vida y siempre tiene una palabra amable", confesaba en 'El Hormiguero' hace años. La marquesa de Griñón siempre ha tenido una palabra bonita para el escritor, de quien aprendió mucho durante los años que compartieron techo: "Le interesa todo, habla con el jardinero, con el guarda de la caseta, con todo el mundo. Y todos los días tiene la misma rutina: se levanta a las 5:30, lee, hace deporte durante una hora, se ducha, desayuna y ya empieza a escribir. Pero es que de trato es genial porque le interesa todo", detallaba.
El cariño era recíproco, en una entrevista en 2015, el Premio Nobel resaltó el buen carácter de la marquesa: "Siempre está de buen humor y siempre risueña", contaba. Sin embargo, con la ruptura sentimental también se ha producido un adiós entre ellos, aunque a juzgar por sus declaraciones Tamara no le guarda rencor.