Una semana después del gran día, Tamara Falcó sigue en una auténtica pompa. El 40 cumpleaños de la hija de Isabel Preysler sigue dando mucho qué hablar y sobre todo después de conocer el percance que sufrió la protagonista con uno de sus impresionantes vestidos. La influencer ha reaparecido este jueves en 'El Hormiguero' y ha hecho un repaso del que fue un día inolvidable para ella.
Tamara ha contado a sus compañeros el orgullo que fue para ella poder diseñar el menú de la cena de la mano del prestigioso chef Ramón Freixa y, además, lucir un vestido llegado directamente desde un museo. Como lo lees, el espectacular diseño nupcial en color champán repleto de flores bordadas "me lo trajeron de Holanda", contaba con suma naturalidad.
Ha sido en ese momento cuando ha hecho público el contratiempo que vivió con su primer vestido durante horas: "Abrimos un salón y estaba todo lleno de globos y me hizo mucha ilusión pero no me di cuenta de que durante toda la cena llevaba cuatro globos por dentro del vestido, y solo los vi cuando fui a cambiarme", contaba despertando las risas entre sus compañeros. Cabe recordar que la falda era muy voluminosa por lo que los globos fueron entrando sin que la cumpleañera se percatara de su presencia.
Para la segunda parte de la fiesta, Tamara optó por un diseño cargado de personalidad. La marquesa de Griñón devolvió esa joya de Jan Taminiau a su estilista y terminó la noche con un imponente vestido con estampado de flores que no pasó desapercibido para nadie.
Al margen de los detalles estilísticos lo que es una realidad es que Tamara vivió una noche inolvidable rodeada de su familia y amigos más íntimos, sin duda una precuela a lo que podría ser su boda con Íñigo Onieva.