¡El día ha llegado! Después de meses de duro trabajo en la creación artística de su nueva colección para Pedro del Hierro, Tamara Falcó (41 años) cumple un sueño al ver sus creaciones sobre la pasarela de la MBFWM, y lo ha hecho acompañada de su futuro marido, Íñigo Onieva (33 años). "Que ilusión me hace. Ver mis diseños desfilar por primera vez en la fashion week me hace mucha ilusión (...) Ha sido una gozada", confesaba.
Un día único para el que tiene preparado una gran sorpresa y que ha compartido, como era de esperar, con Íñigo Onieva. El empresario, visiblemente nervioso, no se ha querido perder este día y no ha dudado en fundirse con su chica en un romántico beso. La pareja ha hecho gala de su amor y complicidad ante las cámaras en el que es su primer posado tras la reconciliación.
La gran ausente ha sido Isabel Preysler, (71 años) quien seguirá la presentación desde casa. La socialité está en el foco mediático desde que el pasado mes de diciembre anunciara su ruptura con Mario Vargas Llosa, y su hija lo ha justificado alegando que todo lo ha organizado con muy poco tiempo.
Tamara Falcó, radiante en su faceta working girl
Consciente de que iba a ser el centro de todas las miradas, Tamara ha optado por un impoluto estilismo que, aunque a primer golpe de vista parece blanco, se trata de un tono lila muy clarito. Un traje de chaqueta que pertenece a la nueva colección de Cortefiel, y que confirma su pasión por las blazers y los looks working girl más sofisticados.
Se trata de un dos piezas compuesto por una blazer de estilo masculino, amplia solapa, bolsillos y botón forrado, que ha combinado con un pantalón de tiro alto con pata de elefante a juego que le sentaba como un guante. Una blusa satinada y salones de punta, también blancos, ponían la guinda a este outfit que es inspiración para las novias más modernas.
Los frentes abiertos de Tamara Falcó en su cara a cara con la prensa
Envuelta en una enorme expectación, Tamara Falcó se ha enfrentado a todas las polémicas que le han rodeado en los últimos meses, y como es habitual no ha dudado en responder absolutamente a todo. La marquesa de Griñón ha asegurado que su madre se encuentra bien y le desea todo lo mejor a Mario Vargas Llosa, a quien no le guarda ningún rencor. "Mi madre y Mario han roto y ya está...", manifestaba con naturalidad.
Cabe recordar que hace solo unos días, Tamara protagonizaba un encuentro de lo más incómodo con Patricia Llosa, exmujer del Premio Nobel. Un ¡tierra trágame! que ambas saldaron con la indiferencia. Pero si hay algo que ocupa su día a día es su inminente boda con Íñigo Onieva. La protagonista ha confesado que está muy ilusionada y su prometido está muy implicado en los preparativos. "Había una parte que necesitaba ser sanada... Estamos trabajando en ello. Me he dado cuenta de lo que significa el amor", ha reconocido.
Tamara se desenvuelve entre las cámaras como pez en el agua, ya lo vimos cuando se vio obligada a dar la cara tras la traición de su prometido, y esta vez no ha sido menos. Sea como fuere, este es uno de los días más especiales de su vida, y piensa disfrutarlo al máximo como solo ella sabe.
Las piezas clave de su nueva colección
Ópera Prima es el nombre que recibe una colección en la que ha trabajado mano a mano con Nacho Aguayo y Álex Miralles, directores creativos de la firma española, y que es pura inspiración para invitadas. "Viste de Tamara Falcó para bodas y momentos especiales. Descubre una colección llena de estilo y sofisticación", cita la marca. La marquesa de Griñón se ha convertido en un icono de estilo por méritos propios y desde que empezó su andadura junto a la firma Pedro del Hierro, la mejor embajadora de sus propias creaciones. "Todo el tiempo dedicado ha dado sus frutos y me apetece mucho que podáis verlo", confesaba la protagonista.
A lo largo de estas semanas, Tamara ha ido compartiendo pinceladas de lo que podremos encontrar sobre la pasarela y la expectativa es máxima. Vestidos únicos de todas las formas, tonos y estampados, escotes imposibles, trajes de chaqueta actualizados... Una explosión de color ideal para la próxima temporada. Todo ha estado cuidado hasta el mínimo detalle, y prueba de ello es que la hija de Isabel Preysler se quedó hasta última hora puliendo personalmente cada uno de los estilismos.