¡Por fin! Susanna Griso ha recibido la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus en el Hospital Zendal. La presentadora de Espejo Público ha seguido los pasos de Ana Rosa Quintana y ha hecho partícipes a toda a audiencia de su programa de su vacunación en pleno directo: "No soy colectivo esencial, me toca Pfizer, no me dan a elegir", ha confesado micrófono en mano. Hace apenas dos meses, era Ana Rosa la que se enfrentaba a esta situación. La periodista acudía al Wanda Metropolitano con su cámara de confianza y se sinceraba con todo su público: "No tengo ningún miedo ni ninguna preocupación. Para mí es un premio y una suerte"... Y Susanna ha coincidido con ella ya que no ha mostrado nerviosismo alguno. Eso sí, sus compañeros de trabajo han desvelado que es una "cagueta consumada".
Antes de entrar en la sala, Susanna Griso ha mantenido una distendida charla con uno de los médicos residentes y ha mostrado interesada por la cantidad de dosis que está llegando a España. Tras esto, el momento de la verdad ha llegado y la presentadora de Antena 3 ha sido vacunada, un momento esperadísimo. Además, se ha sabido que uno de sus mayores miedos son las agujas: "No estoy nerviosa pero lo que no puedo mirar es el pinchazo", ha relatado ante la atenta mirada de la enfermera.
Segundos después, una sonrisa se vislumbraba debajo de la mascarilla e incluso se ha atrevido a mostrar su faceta más bromista, algo que ha arrancado las risas de los colaboradores presentes en plató: "¡Qué maravilla! No me he enterado de nada. No molesta nada. ¿No tengo excusa para no ir otra vez a trabajar, no?", ha dicho entre risas.
Susanna está a un paso de recuperar la normalidad después de un año convulso. Además, gracias al confinamiento obligatorio se ha atrevió a recuperar uno de los hobbies que había dejado de lado: ¡ha vuelto a tejer!