Sus hijos, la mayor lucha entre Haya de Jordania y Mohamed bin Rashid

La princesa y el emir de Dubái se verán las caras en el Alto Tribunal de Londres los días 30 y 31 de julio

Haya de Jordania y emir
Gtres

Aún no ha terminado la truculenta historia de la huída de Haya de Jordania, y es mucho lo que se ha escrito en los medios sobre las razones de la princesa para escapar de su hogar y buscar refugio en Londres, acompañada de sus dos hijos. La petición de asilo político, el deseo de divorcio del emir Mohamed bin Rashid, la afirmación por su parte de sentir miedo, un supuesto romance con uno de sus guardaespaldas personales y, ahora, la lucha por la custodia de sus hijos.

Será los próximos días 30 y 31 de julio cuando la princesa y el emir de Dubái se vean las caras en el Alto Tribunal de Londres. Y no será por su divorcio ni por el reparto de una gran fortuna, sino por Sheikha Jalila y Sheikh Zayed, de 11 y 7 años respectivamente, los hijos en común de la aún pareja. Mohamed quiere que los niños regresen a su país, mientras que Haya luchará por que permanezcan con ella en la casa que hace un año adquirió en Londres, ubicada al lado del palacio de Kensington.

Esta noticia es la única información que se ha hecho pública tras la vista privada que el pasado jueves se celebró ante el presidente de la División de la Familia del tribunal superior, Sir Andrew McFarlane. Según se ha comunicado oficialmente, los procedimientos en los que están inmersos "se refieren al bienestar de los dos hijos del matrimonio y no al divorcio ni a las finanzas", y eso es lo que se pretende concluir en el próximo proceso judicial donde la pareja se volverá a ver las caras.

Sobre el divorcio y los verdaderos motivos de la huída de Haya no se ha dicho nada más. La relación de la princesa con su guardaespaldas cada vez cobra más sentido, y los celos del emir se acentúan día tras día, motivos por el cual ella ha llegado a temer por su vida. Un miedo infundado también debido a los relatos de una de las hijas del emir con otra de sus mujeres, la princesa Latifa, donde aseguraba que hubo torturas y que fue sometida a un cautiverio, testimonios que Mohamed bin Rashid siempre ha negado.