Hace unas semanas, era la propia Rocío Flores quien desvelaba, entre lágrimas, que la única razón por la que había decidido participar en 'Supervivientes 2020' tenía nombres y apellidos y no, no se trata de su madre sino de su hermano David: "Cuando vine pensé en mi hermano. Mi hermana tiene a su madre y a su padre pero mi hermano solo tiene una parte, y quiero ayudar en especial a mi hermano", reconocía con un evidente dolor.
Una vez más, el hijo pequeño de Antonio David y Rocío Carrasco ha sido el protagonista de las conversaciones de su hermana con algunos de sus compañeros y es que la joven se ha puesto una 'obligación' de proteger a su hermano que quizás no le pertenece.
Estos últimos días, todos los supervivientes han aprovechado para disfrutar al máximo de las últimas horas en el paraíso y muchos pensamientos les han venido a la mente. Aunque siempre le ha intentado mantener al margen de la exposición mediática, Rocío se abría en cuerpo y alma y mirando al mar definía a su hermano David como un ser "muy especial": "Transmite una luz... Es súper especial, todo el mundo lo dice", explicaba sin poder borrar la sonrisa de su boca.
Además, ha explicado que nunca se había separado de él tanto tiempo, una situación que le ha provocado varios bajones anímicos a lo largo del concurso: "La bondad que tiene es él, ese sí que es mi otra mitad. Lo máximo que me he separado de él han sido 15 días y llevo 3 meses sin saber nada de él... Es lo que más me ha martirizado del concurso".
Rocío ha aprendido mucho de su paso por 'Supervivientes' y es algo que piensa llevarlo a la práctica en España. Lo más importante es que desea dejar las guerras familiares a un lado y sueña con una reconciliación con su madre.