Apenas quedan unos días para que, por fin, tenga lugar la gran final de ‘Supervivientes 2020’. Tras más de tres meses en Honduras, los concursantes ya se encuentran en España a la espera del gran momento. Totalmente confinados y cumpliendo a rajatabla las medidas marcadas por el Gobierno, seguro que todos cuentan las horas para poder volver a reencontrarse con sus seres queridos. Un momento especialmente importante para Rocío Flores.
Tras dejarlo claro durante todo el programa, la hija de Antonio David Flores espera que su paso por ‘Supervivientes 2020’ sirva para poder vivir un acercamiento con su madre, Rocío Carrasco. Eso sí, por el momento se tendrá que conformar con ver a otra persona muy especial para ella: su novio, Manuel Bedmar.
Tras cuatro años de relación, esta es la primera vez que los jóvenes han pasado tanto tiempo separados. Una distancia que cada día es menor, tal y como ha mostrado Manuel en su cuenta de Instagram. El malagueño ha compartido una imagen en la sección de ‘stories’ con la que deja claro que ya se encuentra en Madrid para recibir a su chica en cuanto termine el concurso. Reacio a las cámaras, no queda claro si dará el paso definitivo y acudirá a plató o, por el contrario, esperará a que esto se produzca en la intimidad.
¿Primera vez en televisión?
Si finalmente Manuel termina yendo a recibir a la concursante a plató, el joven seguiría los pasos de su chica. Cabe recordar que la primera vez que la hija de Antonio David Flores se puso delante de las cámaras fue en el mismo programa. En su caso, durante el recibimiento de Gloria Camila. Rocío decidió dejar atrás todos sus nervios y tener este detalle de cariño con su prima. Un gesto que, ahora, también podría tener su novio con ella. Todo tras pasar más de tres meses separados.