La gala 13 de Supervivientes 2020 estará marcada por la tensa bronca de Elena Rodríguez, la madre de Adara, y Rocío Flores. Las dos ex amigas han puesto las cartas sobre la mesa y, aunque al comienzo del concurso se admiraban mutuamente, ahora directamente no se soportan. Y, por supuesto, por el adiós de Ivana Icardi, que se ha convertido en la décima expulsada del concurso tras haber sido líder 4 veces siendo para muchos una de las favoritas para ganar la edición.
Jorge Pérez se ha librado en esta ocasión como ya lo hizo Hugo Sierra, el pasado martes en Tierra de Nadie, pero no han estado tranquilos por mucho tiempo, ya que sus compañeros han decidido que vuelvan a estar nominados pero en esta ocasión con Elena Rodríguez. Un duelo a tres muy duro y que pone a la madre de Adara en un serio aprieto. Si bien Jorge es su amigo más fiel en la isla, Hugo Sierra es el padre de su nieto y, tras muchas polémicas, firmaron una especie de tregua hace un par de semanas. Una paz que, en estas últimas nominaciones, Hugo ha respetado pero no Elena, que le ha nominado a pesar de que le dijo que nunca más lo haría.
Elena, Hugo y Jorge se juegan una expulsión clave de cara a la gran final del concurso cada vez más cercana, un auténtico reto para la madre de Adara y es que se enfrenta a dos grandes favoritos (demostrados) del público. A Hugo Sierra su legión le ha salvado muchas veces, las tres últimas en la ceremonia de salvación de los martes con Carlos Sobera, y Jorge Pérez, a pesar de ser un desconocido, ha ganado la batalla en las dos últimas semanas a, ni más ni menos, que Yiya y, esta noche, a Ivana Icardi.