La recta final de Supervivientes 2020 ha empezado y a tan pocas semanas de la gran final hay rupturas y nuevas alianzas que nos están sorprendiendo mucho. En la última gala fue expulsada Ivana Icardi, una de las concursantes más fuertes, y todos los concursantes se han quedado descolocados. Además, Elena y Rocío Flores han roto su amistad tras tres meses de concurso y Hugo Sierra que siempre ha estado en tierra de nadie se ha posicionado claramente, y no al lado de su ex suegra.
Hugo Sierra y Elena Rodríguez han tenido una relación durante el concurso llena de idas y venidas. Se tiraron del helicóptero enfrentados pero, al final, unidos por el amor al pequeño Martín, hijo del uruguayo y Adara y nieto de Elena, acabaron firmando una especie de tregua y decidieron empezar de cero.
Algo que nunca han conseguido, y en esta última gala la balanza ha terminado de inclinarse. Hugo siempre ha acusado a Elena de darle una de cal y otra de arena y de algo parecido le acusa Rocío Flores, con la que la madre de Adara protagonizó una monumental bronca en Palapa. Tras este enfrentamiento Hugo se posicionó al lado de Rocío dándole la razón en que Elena es una superviviente muy negativa y "con mala actitud". Y Rocío Flores le agradeció el gesto defendiéndole ante Elena.
La madre de Adara, después de que el uruguayo se posicionase junto a la hija de Antonio David, le atacó asegurando que él no es precisamente la alegría de la huerta. Y la hija de Rocío Carrasco intervino para dar su opinión dejando claro que cada vez se siente más cerca del uruguayo: "Hugo, cuando no está en plan solitario, se viene con nosotros y me da ratos buenísimos, me lo paso en grande con él".