Se acabó Supervivientes 2020 para Cristian Suescun. A pesar de la movilización que en redes han llevado a cabo su hermana, Sofía Suescun, y su madre, Maite Galdeano, el joven no ha superado el televoto en Playa Desvalida frente a Nyno, Yiya, Hugo Sierra, Ivana, Ana María Aldón y Antonio Pavón, y ha tenido que expulsar definitivamente el concurso siguiendo los pasos de Bea Retamal, Alejandro Reyes y Vicky Larraz. Un adiós en un momento crucial del programa, el día en el que la unificación se ha producido y cuando empezaba a tener sintonía con sus compañeros tras cinco semanas de bastantes polémicas.
"Me da mucha pena, pero.. ¿Qué se le va a hacer? Hay gente que ha gustado más", ha dicho Cristian tras conocer que era él el elegido por la audiencia para marcharse. Cristian ha agradecido a todos haber vivido una experiencia tan única y enriquecedora, y se ha ido motivado con su regreso a España (que tendrá que esperar ya que no puede volar a España por la crisis del Covid-19): "Tengo muchas ganas de ver a mi madre, a mi hermanita y a mi niña. Gracias a toda la gente que me ha votado".
Jorge Javier Vázquez ha agradecido al hijo de Maite Galdeano su generosidad en los buenos y los malos momentos y ha querido animarle con unas bonitas palabras: "Tu paso por el concurso ha servido para que mucha gente te conozca y te coja mucho cariño".
Lo cierto es que Cristian no empezó con el mejor pie en Supervivientes. En la segunda semana se convirtió en dios de la isla y su actitud lo enfrentó a casi todos sus compañeros. Luego protagonizó tensos desencuentros con Bea, José Antonio Avilés o Rocío Flores, con la que a pesar de todo logró tener sintonía. El hermano de Sofía Suescun fue muy criticado por su actitud rebelde en los primeros días en los Cayos pero todos han valorado su evolución, para bien, en el concurso. "Sois muy buena gente todos", ha dicho a sus compañeros al despedirse.