'Supervivientes 2018': María Jesús Ruiz protagoniza el último abandono

Kiko Hernández confirma que ya hay una concursante que ha puesto rumbo a nuestro país

Kiko Hernández soltó la bomba este viernes en 'Sálvame': una concursante ha abandonado 'Supervivientes 2018' debido a "motivos ajenos a su voluntad". ¡Ay, que están dejando desiertos los Cayos! El tertuliano se resistió a dar el nombre de este nuevo abandono que ya está viajando a nuestro país, pero FórmulaTV confirmó de quién se trataba. Nada más y nada menos que María Jesús Ruiz. En las últimas horas, la ex Miss España sufría un auténtico ataque de mosquitos y las picaduras dejaban su rostro irreconocible. Sin embargo, éste no es el motivo por el que María Jesús ha abandonado la isla, sino un juicio.

'Socialité' pudo confirmar el sábado que, efectivamente, María Jesús llegará a España el domingo, acudirá al juicio que tiene pendiente, y regresará a la isla el miércoles.

Antes de su participación en 'Supervivientes', la de Andújar había interpuesto una denuncia a José María Gil Silgado por presuntos malos tratos. Este próximo lunes 16 de abril –aunque también se habla de que el juicio podría ser el martes– tiene que comparecer como testigo en la vista de esta causa judicial. De ahí que haya tenido que abandonar de forma tan fortuita el concurso.

María Jesús Ruiz

María Jesús está contra las cuerdas, pues tanto ella como sus abogados han intentado por todos los medios aplazar la cita judicial. Para ello, sus representantes han alegado "motivos laborales" y han presentado su contrato con el reality, pero ha sido en vano y no ha sido aceptada la petición por parte del juez. En el caso de que decidiera no presentarse, la modelo podría enfrentarse a una multa que oscilaría entre los 200 y los 5.000 euros y, en caso de reincidir, incluso "se le podrían abrir diligencias penales por un delito de desobediencia".

El juicio responde al episodio relatado por María Jesús Ruiz, que sostenía que Gil Silgado le habría estado enviando cartas amenazantes desde prisión, en las que la coaccionaba advirtiéndola que contaría aspectos comprometedores de su vida privada. La intención de su expareja era, por entonces, que la modelo le llevara a su hija a prisión para verla. El empresario se enfrentaría en esta causa a 22 meses de prisión "por delitos de amenazas y coacciones".