El sonado enfado de Silvia Bronchalo tras visitar a su hijo Daniel Sancho en prisión

​​​​​​Las visitas de Silvia Bronchalo (48 años) a la prisión de Koh Samui para ver a su hijo Daniel Sancho (29 años) ya son habituales. Desde que llegó a Tailandia, la expareja de Rodolfo Sancho (48 años) no ha fallado ni un solo día en acudir a la cárcel. En los últimos días empezó a llevar consigo una mochila en la que llevaba algunos objetos que su hijo le había pedido. La complicada situación en la que se encuentra Daniel ha hecho que el rictu de Silvia siempre haya sido serio, pero en su última visita la madre del chef se ha mostrado muy enfadada. ¿Cuál es el motivo?

Su llegada ya auguraba que algo no iba del todo bien. Para empezar, Silvia llegaba "un poquito más tarde lo que lo suele hacer", han afirmado en 'El programa del verano'.  Con sus habituales gafas de sol y una gorra oscura, Silvia llegaba más seria que nunca. Su paso era ligero, pero firme, con una mochila, de nuevo, cargada.

Bronchalo no ha hecho ninguna declaración ni a la entrada ni a la salida de la cárcel. Eso sí, sus gestos han hablado por ella. "Estaba especialmente enfadada. De hecho, ha dado un fuerte portazo al taxi", ha contado la reportera. El motivo de ese enfado se desconoce. ¿Es por la presencia de los medios? ¿Habrá discutido con su hijo, Daniel? ¿Estará sobrepasada por todo lo que ha tenido que vivir en las últimas semanas?

El importante desembolso económico de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo

La estancia de Daniel Sancho en la prisión de Koh Samui promete alargarse, una situación muy complicada que habría llevado a sus padres a tomar ciertas decisiones que afectan de manera irremediable a su vida y su situación económica. Y es que, para estar cerca de su hijo, ambos deberán invertir mucho dinero en el país asiático para costearse la vida.

Aunque es cierto que, en comparación con España, Tailandia no está considerado un país caro, vivir allí implicará un importante desembolso económico que Rodolfo y Silvia no tenían planeado. De momento, Silvia se ha instalado en el hotel Samui Bayview Resort & Spa, un complejo de tres estrellas cuyo precio ronda los 60 euros/noche en función del tipo de habitación. A esto se le debe sumar, las comidas diarias y los 12 euros diarios que lleva a su hijo en cada visita.

Precisamente de ello a hablado Two Yupa desde el plató de 'Espejo Público', que sabe perfectamente cómo se vive en Tailandia. "Una casa para vivir, pagar alquiler, hoteles... es caro", contaba al mismo tiempo que aconsejaba a la familia alquilar una residencia por un periodo más largo porque "será más económico". 

La mano derecha de Silvia Bronchalo en Tailandia

Hace pocos días, salían a la luz las imágenes de Silvia Bronchalo en compañía de dos hombres. ¿Quiénes eran? ¿Amigos de Daniel? Hoy la duda ha quedado resuelta. Una de las dos personas que se encuentran en Koh Samui junto a Silvia es un empresario de origen asturianoque tiene un negocio allí. Él, entre otros, forma parte de la pequeña comunidad española de la isla que está ayudando a la madre de Daniel con sus gestiones diarias. Esther Yañez lo confirmaba en 'Código 10', asegurando que este hombre no conocía de antes a Bronchalo.

Con él, y otro hombre, Silvia protagonizaba las primeras imágenes alejada de la prisión en la que se encuentra su hijo. En ellas, la podemos ver en un ambiente más distendido y con una actitud algo más relajada. Sin gafas de sol y hablando por teléfono, Silvia pasó un rato con estos hombres antes de recorrer con ellos algunos puntos de la isla. Finalmente, volvió al nuevo hotel dónde se esta hospedando. 

La pregunta que hizo Daniel Sancho al juez

Desde el primer momento hemos podido conocer que el autor confeso del crimen al médico colombiano había hecho una extraña pregunta tanto al juez como a las personas con las que había mantenido contacto. El chef se preguntaba si su caso estaba siendo mediático, algo que ya nos habían indicado en anteriores comparecencias los encargados del caso en Tailandia y los portavoces de la familia en España.

Ahora se ha conocido que también se habría interesado en exceso por conocer si el tiempo que está pasando en la prisión de Koh Samui le terminaría restando días a su condena final, una vez que la sentencia sea firme por parte de la fiscalía tailandesa. Esta pregunta tendría sentido en el caso de que no se le condenase a pena de muerte, tal y como ha pedido la policía, ya que si la resolución es distinta, Daniel podría pasar ocho años en las cárceles del país asiático para después poder conmutar la pena en nuestro país, algo que le acabaría restando días.