Muy comprometido con el reino animal, Frank Cuesta (52 años), que en estas semanas ha aconsejado a la familia Sancho durante semanas por sus problemas con la justicia en Tailandia, se ha visto envuelto en una polémica familiar. Su santuario, donde cuida de varias especies y rescata a otras que han sido capturadas por la venta ilegal para después ponerlas en libertad, pertenece a su mujer porque en el país asiático no se puede tener una propiedad a su nombre, algo que le está trayendo muchos quebraderos de cabeza.
Hace unos días que el presentador contaba que Yuyee, su exmujer rompía el pacto que tenían sobre la propiedad porque le pedía 3.500 euros mensuales para mantenerlo porque legalmente es de ella. Tal y como ha contado el protagonista, el compró las hectáreas del terreno donde cuida a los animales poniéndolo a nombre de ella (porque sí podría haberlo puesto a otra persona tailandesa) con la condición de que después se pusiera como propietarios a los hijos de ambos.
Pidiéndole ese alquiler desorbitado (porque sabe que en el país asiático los precios no son los mismos), Frank ha asegurado que, influenciada por el nuevo amor de su ex (el actor Chris Korn), ella no está cumpliendo con lo hablado y además la situación ha empeorado cuando este pasado miércoles le han denunciado. "Pues nada.... Denuncia en la policía porque resulta que la parejita no se siente segura por las amenazas que ciertos despojos le han hecho en internet y, claro, yo soy el causante. ¡No hay manera de librarse de este drama!", ha escrito en sus redes sociales.
Mientras tanto, Cuesta intenta por todos los medios no perder el santuario. Tras negarse a pagar ese alquiler, el presentador ha querido comprarle su parte (entendemos que para ponerle el nombre de otro amigo tailandés) pero ella le habría pedido alrededor de un millón de euros, el precio que valdría ahora. "No sé si es porque hay una nueva pareja desde hace un año, por rencor... El santuario no es mío, nunca será mío", ha expresado.
Al límite, parece que Frank ha llegado al acuerdo de pagar 250.000 euros en cuatro cuotas a Yuyee si esta pone al nombre de su hijo mayor la propiedad. "No es algo que yo quiera, ni creo que sea justo, pero al final lo pagaré. Se ha aprovechado de la situación, de que no puedo perder este santuario", ha dicho decepcionado. Por eso, el aventurero está pidiendo ayuda a través de sus redes sociales, donde ha explicado la manera de contribuir a la causa.
A través de un directo de 5 días seguidos a partir del próximo 9 de agosto, Frank pide a sus millones de seguidores que donen la cantidad que quieran en membresías de una web que comparte en su Youtube. A cambio él ofrece cada cuatro horas una actividad (seis al día) en las que ver lo que hace en el santuario con los animales. En el vídeo, el herpetólogo hace un llamamiento a todos los streamers e influencer spara que le echen una mano para recuperar el terreno: "Ayudadme al salvarlo y pagar ese chantaje para que la tierra esté a nombre de mis hijos y que nadie las pueda tocar nunca".
El varapalo de Frank con Yuyee
Defraudado con haber tenido que llegar a este punto, Frank, que estalló hace unos meses contra Daniel Sancho por su actitud en la corte tailandesa, no entiende por qué su ex le está haciendo esto cuando él siempre se ha portado muy bien con ella. De hecho, en 2014,un tribunal de Bangkok la sentenció a una condena de 15 años de cárcel y una multa de 1,5 millones de baht (unos 42.000 euros al cambio actual) por posesión y tráfico de cocaína. Una situación por la que Cuesta jamás la abandonó.