La ruptura de Shakira y Gerard Piqué sería todo menos pacífica. Al menos, por las informaciones que empiezan a sonar alrededor de la expareja. Si el primer movimiento implicada un cambio de domicilio del futbolista, que actualmente reside en el piso que posee en el centro de Barcelona, ahora la cantante estaría planeando blindar su intimidad en su propia casa. O más bien, en la parcela que ocupa su casa y otras dos donde residen sus padres y los padres de Piqué.