Sergio Ramos está exprimiendo al máximo sus vacaciones antes de su vuelta inminente al trabajo. Tras un romántico viaje de lujo a México y Los Ángeles con Pilar Rubio, unos días de playa con los más pequeños y un reencuentro con toda su familia en su finca sevillana, el futbolista ha puesto la guinda al verano con una escapa fugaz a Ibiza con un grupo de amigos.
Sin nada que envidiar a Messi y Cesc Fábregas, que hace solo unos días también surcaron las aguas de la isla pitiusa, Sergio Ramos, con copa de vino en mano y buena música, ha disfrutado de lo lindo de estos días de desconexión con amigos. La mejor medicina para encarar la nueva temporada con el Paris Saint Germain. Ramos, visiblemente bronceado, ha presumido de abdominales con un sencillo bañador de color negro mientras se reía con las bromas y ocurrencias de sus amigos, y es que ni siquiera en vacaciones se ha librado de sus intensos entrenamientos.
Las vacaciones han terminado y Sergio ya está de vuelta en París para hacer frente a sus compromisos con el PSG. Él mismo compartía a través de su perfil de Instagram el detalle que Neymar tuvo con sus hijos mayores. El futbolista brasileño firmó sus botas para Sergio Jr y Marco y los pequeños no podían estar más ilusionados con la sorpresa.
Justo ahora se cumple un año de la mudanza de Sergio y Pilar a la capital francesa. Un primer aniversario cuyos inicios no fueron fáciles pero del que no se arrepienten ya que, gracias a su unión, han hecho de París su nuevo hogar, una ciudad que les acogía con los brazos abiertos y en la que están muy felices a pesar de la distancia que les separa de sus seres queridos.