Carlos Soberaya está más que curtido en eso de presentar galas de programas como ‘Secret Story’. Cada vez que se pone al frente de un ‘reality’, el presentador muestra mucho desparpajo y naturalidad tanto en las conexiones en directo con la casa, como al conversar con los colaboradores del plató, como al dar paso a los vídeos. El buen rollo que tiene con los concursantes y con sus compañeros es más que evidente. Una buena sintonía que hoy ha quedado patente en un momento en el que un micrófono abierto le ha traicionado.