Pocas veces una simple imagen ha dicho tanto. Aunque hace unas semanas era reacia a afirmarlo, Sara Carbonero, por fin, ha confirmado ese secreto a voces del que llevamos días hablando: ella e Iker Casillas esperan su segundo hijo.
Está comenzando el segundo trimestre aunque nadie lo diría, porque está delgadísima. Dice que por culpa de un virus que le pegó el pequeñajo de la casa, Martín, aunque no quiere que nadie se preocupe: "Con un niño pequeño en casa es muy común que te cojas algo, cuando no es una cosa es otra. No tiene nada que ver con el embarazo. De hecho, el anterior y éste son bastante buenos, sin muchos síntomas ni molestias".
Todo en orden, entonces. Sara ha reaparecido delgada pero en plena forma en la presentación de un coche familiar, ironías de la vida, con el que se siente muy identificada: "Es muy urbanita, muy para mujeres modernas. Y además pequeño, que se adapta a mi estilo, para hacer recados y tal es estupendo".
Desde que saltaron los rumores todo ha girado alrededor de ese bebé que, por fin, ya sabemos a ciencia cierta que espera. Está en el segundo mes de embarazo y aún no tienen nombre. De hecho no se inclina por ningún sexo: "Me da igual niño o niña. Todo el mundo me dice: "ay, la parejita". Yo, la verdad, no he sido nunca de parejitas. Si viene niña, genial. Y si es niño, para Martín va a ser muy bueno". A Iker también le da igual, pero en lo que no parecen tenerlo muy claro ninguno de los dos es en el nombre del futuro cuarto miembro de la familia: "Con Martin lo cambié tantas veces que ahora prefiero esperar un poco.Tengo la lista de la otra vez, pero me han cambiado los gustos creo, así que no sé si hacer otra porque de aquí a que nazca el bebé me da tiempo a cambiar mil veces de nombre".
El otro peque de la casa parece llevar bien la buena noticia, aunque aún no entienda del todo lo que significa, y no tienen miedo a que Martin le coga celos a su hermanito: "Yo me estoy informando, pregunto a mis amigas para ver cómo sobrellevarlo si sucede. Pero creo que como se van a llevar tan poco tiempo, Martín no es lo suficientemente mayor como para tener celos ni nada. No es nada egoísta. Es muy pequeño, pero tiene un carácter tranquilo, es simpático y noble".
La otra gran duda es dónde nacerá el bebé y cuál es el futuro más inmediato de la familia 'Carbonillas' y el suyo profesional: "Tengo mis ginecólogos en Madrid y en Oporto. Hay muy buenos profesionales en ambos sitios. Yo estoy en excedencia y voy a seguir con mis cosas igual que hice entonces, que estuve hasta quince días antes de dar a luz trabajando". Y cuando se le pregunta sobre si volverá en calidad de periodista deportiva o de moda se muestra abierta a lo que le depare el destino: "Me gustan ambas cosas. Es totalmente compatible. Empecé hace trece años y fue en deporte, pero oye, lo que surja. Estoy abierta a hacer un proyecto bonito".
Un destino que para ellos ha sido caprichoso pero en el sentido más bonito de la palabra y al que le dejan todo lo que esté por llegar siempre que, como ésta, sean buenas noticias: "Con lo que viene ahora, durante unos meses no me planteo nada de boda" ¿Y otro bebé pronto? "Somos de vivir muy al día. No sé si de repente se me puede pasar por la cabeza después de que nazca el bebé. Estas cosas no se calculan porque sencillamente vienen cuando vienen, pero claro, era un buen momento. Yo estoy más tranquila y los niños no se llevan mucha diferencia de edad".