Lo tiene difícil Sandra Barneda esta noche para eclipsar a las dos grandes protagonistas de las Campanadas, Cristina Pedroche y, sobre todo, Ana Obregón. La periodista se une a Cristian Gálvez para decirle adiós a este 2020 desde Canarias. Un año complicado pero que para Barneda no ha sido del todo malo. De hecho, tras una larga trayectoria profesional, la presentadora ha encontrado estos meses algunos de los logros que más ilusión le habrán hecho. Una felicidad que no ha podido disfrutar plenamente debido a la situación pero que sí ha compartido con su pareja, Nagore Robles.
¿Quién le iba a decir a Sandra Barneda que terminaría el año consagrada como escritora? La periodista, con varias novelas en el mercado, se alzaba con el finalista del Premio Planeta justo mientras se encontraba presentando -en diferido, pues ya estaba grabado con anterioridad- la segunda edición de 'La isla de las tentaciones'. Una curiosa casualidad que copaba los titulares pero no empañaba la alegría de Barneda.
La presentadora ha encadenado éxitos este año, tanto en el terreno personal como profesional, pese a que la situación ha hecho que no haya podido celebrarlos como toca. Cogerle el testigo a Mónica Naranjo era complicado, pero la segunda entrega de 'La isla de las tentaciones' ha cumplido expectativas holgadamente. De hecho, la tercera, a punto de estrenarse, promete ser todavía más revolucionaria.
Feliz al lado de Nagore
Tras una ruptura que pocos esperaban, Nagore y Sandra Barneda se daban otra oportunidad. La pareja, sin grandes anuncios, acercaba posiciones hasta volver a retomar su historia. "Nagore y yo vivimos separadas y estamos muy bien así", aseguraba en exclusiva para 'Lecturas'. “De momento, no nos lo planteamos porque, tal y como estamos, nos sentimos muy a gusto. Creo que todo llegará”. Los nuevos tiempos han hecho que la colaboradora y la presentadora vayan poco a poco.
Eso sí, Nagore no ha dejado sola a Sandra en ningún momento. Pasaron el confinamiento separadas, ya que Barneda dio positivo -“con mascarilla, todos los días, desde los los extremos del portal, nos veíamos 30 segundos y se marchaba”, explicaba a esta publicación-, pero desde entonces han estado juntas. La colaboradora no ha dudado en coger el avión para estar con su novia en Canarias mientras da las Campanadas.
Con su premio debajo del brazo y la oportunidad de cerrar el año en Mediaset, el 2020 deja a la presentadora un regusto agridulce. Muy feliz por los logros conseguidos pero también preocupada por lo que ha ocurrido y lo que viene. Seguro que el año que empieza va mucho mejor.