A Kiko Hernández, para ponerle un 'punto' en la boca hay que tener nervios de acero y, sobre todo, esperar la ocasión la adecuada, porque es muy complicado que deje un cabo suelto o que no tenga preparada una réplica mejor. Sin embargo, Anabel Pantoja, paciente, se ha llevado los aplausos del público de 'Sálvame' por el sonoro corte que le ha propinado en directo.
La tertuliana volvía a su plató después de la final de 'El tiempo del descuento' y disfrutar de un merecido descanso en Canarias junto a su prometido Omar Sánchez. Hernández ha puesto sobre la mesa que esta era la primera ocasión que coincidía con Anabel en el programa después de todo ese tiempo. Vaya, el terreno perfecto para decirse todo lo que tenían guardado y dar espectáculo, y Carlota Corredera ha visto el cielo abierto para 'picarles'.
"¿Y cuanto te gastaste en votar a favor de Anabel?", le preguntaba la presentadora al tertuliano. "Nada", respondía tácito. "Al menos tampoco se ha gastado dinero en echarme...", empezaba ya a desafiar Anabel. Y Kiko ha entrado al trapo, haciendo una confesión que iba a escocer a la sobrina de Isabel Pantoja: "Cuando subí a verte a Guadalix, no había visto ningún día del reality, y todo lo que te dije, te lo dije, porque mira...".
Hernández conseguía el efecto deseado en la finalista de 'El tiempo del descuento' y le interpelaba: "Pero entonces, ¿para qué subiste?". Y su compañero la volvía a retar: "Pues porque me mandaron". La prima de Kiko Rivera no se lo ha pensado dos veces y le ha soltado un comentario que, por la rabia y el alivio que llevaba implícito, llevaba tiempo guardándoselo: "Pues me quedo con la satisfacción de que, al menos ahora, ya no podrás decir que no duro nada en los realities". El público ha estallado en un aplauso y Anabel se ha quedado muy satisfecha de la 'lección' que le acababa de dar a su compañero.
Si bien es cierto que sus 'enganches' son célebres en 'Sálvame', Kiko Hernández y Anabel Pantoja mantienen una excelente relación y solo una sintonía como la que mantienen puede hacer capaz de que sus 'pullas' no vayan más allá y se conviertan en parte (muy importante) del espectáculo del programa.