Lydia Lozano ha sido noticia en los últimos días tras dar (y sostener) una información sobre una supuesta conversación por Whatsapp entre Rocío Flores y su madre, Rocío Carrasco, que nunca llegó a producirse. Todas las partes negaron la noticia pero Lydia siguió defendiéndola y dándole la razón y total veracidad a su fuente, que resultó ser José María Franco.
Finalmente Lydia dio su brazo a torcer, reconoció que le "han metido un gol" y pidió perdón pero su profesionalidad, una vez más, se ha puesto en entredicho y ha sido "vapuleada". Tras muchas tardes de broncas con sus compañeros Lydia se ha sentado en el polígrafo de 'Sábado Deluxe' para zanjar el tema, pero no le ha sido nada fácil.
La periodista, muy tocada, no ha podido evitar las lágrimas al confesar el problema que esta situación ha causado a su madre, de 91 años. El polígrafo de Conchita le ha dado la razón en que no ha buscado ningún tipo de protagonismo con esta historia, tal y como muchos de sus compañeros han afirmado, y Lydia se ha roto. "Mi madre, con 91 años, el jueves se tuvo que tomarse una pastilla por este tema... Con el daño que le hago a mi familia, con el daño que ya le hice, esto no compensa", ha dicho hecha un mar de lágrimas.
Tras "muchas noches sin dormir", Lydia ha dicho que "tendría que estar muy loca" si hubiera mantenido o buscado el tema a sabiendas del enorme daño que esto hace a su familia y muy especialmente a su anciana madre. "Mi madre me dice, cómo pueden poner en duda que eres periodista...", ha dicho rota, a lo que ha añadido: "mis padres me pagaron una carrera para que yo fuera feliz, cómo no me va a doler".