Este fin de semana se puede ya catalogar como el de los retornos televisivos jugosos. Además del de Belén Esteban, con su 'belenazo' en 'Sábado Deluxe'; y el de Makoke en 'Viva la vida', con su controvertida separación de Kiko Matamoros de fondo; tenemos que añadir el de Jorge Javier Vázquez. Esta noche, el presentador también pisaba el plató del magacín nocturno. Antes de que María Patiño le devolviera las funciones de conductor del programa, Jorge avanzó que este jueves próximo arranca 'GH VIP 6', y abrió su corazón en una entrevista íntima y honesta sobre el verano que ha pasado sin su expareja a su lado. A través de sus palabras, llenas de serenidad, gratitud y respeto, dibujó el estrecho y especial vínculo que todavía le une a P. Asimismo, insinuó que dejaba la puerta abierta a una reconciliación.
Porque Vázquez lo tiene claro. Sin una situación tajante entre ellos, la posibilidad de una "segunda parte" está en el aire y es plausible. "Esta ha sido la tónica de nuestra relación. Hemos llegado a estar separados nueve meses. Y sin hablarnos. Nos conocemos muy bien. A la perfección. La historia no la he cerrado, porque no hemos hablado".
A pesar de que reconoce que no han vuelto a hablar desde que su expareja se fue de casa, hay muchos asuntos que ejercen entre ellos como el cordón umbilical o un hilo invisible que sigue conectándolos más allá de la separación. No solo es el enorme cariño que aún queda, es toda la vida en común que habían proyectado y que habían conseguido hacer realidad. Una relación en la que juegan un papel muy importante sus perros. "Tenemos la custodia compartida de los perros, para que veáis cómo es nuestra relación", ha confesado. "Cuando he estado fuera él ha estado allí con los perros. No hemos vuelto a hablar, solo nos hemos mandado un mail, pero todo se organiza de tal manera para que no nos crucemos. Tenemos personas que hacen de intermediarios", ha matizado.
Sorprendería la serenidad y la falta de rencor de Jorge Javier al hablar de P., pero para el presentador en estos diez últimos años de su vida, su expareja ha jugado un papel fundamental, por lo que solo tiene palabras de agradecimiento. No puede ni quiere cargarse diez años tan especiales y significativos con reproches. "Acabar una relación y seguir teniendo buen recuerdo de él, es lo que me queda. Jamás podré decir nada malo de él. Es una de las mejores personas que me he encontrado en mi vida; es la persona que más me ha comprendido y que más le he comprendido también; tenemos muchísima complicidad".
Finalmente ha reconocido: "Sigo acordándome de él y sigo enamorado". "Le sigo queriendo muchísimo, porque son diez años de mi vida muy importantes. Es la persona que más he querido con la que he vivido el amor y, de alguna manera, voy a querer siempre que esté en mi vida. No quiero perderle bajo ningún concepto", ha declarado.
Sobre la posibilidad de volver, ha hecho una madura reflexión: "Las cosas suceden por algo. No sé si algún día volveremos, si no volveremos, si continuaremos o no, pero creo que, después de diez años, a lo mejor también es bueno para las parejas pensar si quieren seguir o no".
Por el momento, considera que no está "preparado para tener ahora pareja y no ha aparecido ninguna otra persona" y que le haya echado de menos "cuando hacía la maleta para irme de vacaciones" es, cuanto menos sintomático y elocuente.