La semana pasada Rocío Carrasco celebraba su tan esperada boda después de casi dos décadas de relación con su novio Fidel Albiac. Sin embargo, la relación que la hija de Rocío Jurado mantiene con su hija fruto de su matrimonio anterior con Antonio David Flores, se tambalea cada vez más y la reconciliación entre una y otra parece ser cada vez más imposible.
Rociíto, decidió no invitar a ninguno de sus hijos al que ha sido considerado como el bodorrio del año. Y aunque por la mala relación que mantienen con su ‘padrastro’, seguramente ni Rocío ni David hubieran querido asistir, el hecho de que su madre no contara con ellos afectó mucho a los jóvenes, que se refugiaron en Chipiona con el resto de la familia Mohedano (que tampoco fue invitada al enlace).
Los hijos de Rocío Carrasco, estuvieron en el balcón de su abuela viendo la tradicional procesión de la Virgen de Regla, de la que tan devota era ‘la más grande’. Con ellos, también estuvo Gloria Camila, hermana de Rocío Carrasco.
Gloria y Rocío, además de ser tía y sobrina, son grandes amigas. Por ello, la hija adoptiva de Rocío Jurado, que además también tiene una gran guerra abierta con la colaboradora de ‘Hable con ellas’, apoya siempre que puede a la joven Rocío Flores.
Gloria Camila, es bien conocida por no callarse cuando tiene que decir algo. A través de una fotografía en Instagram, la joven de 20 años lanzó un mensaje que bien podría servir de indirecta a su recién casada hermana: “Nacimos del mismo árbol, y aunque nuestras ramas crezcan en diferente dirección, siempre nos unirán nuestras raíces.”
A pesar de que Rocío Carrasco está atravesando uno de sus momentos más dulces junto a Fidel, parece que reniega de su familia materna y mantiene una gran guerra con prácticamente todos los miembros del clan Jurado. Sin embargo, a pesar de las polémicas, como bien dice la joven gloria “siempre”, les unirán sus “raíces”.