Hay quien tras un ruptura se corta el pelo, se lo tiñe o se pone en forma. Otros cambian la decoración (que se lo digan a Omar Sánchez y a Anabel Pantoja) y los hay, como Rocío Flores, que habría querido empezar su nueva vida sin Manuel Bedmar estrenando cama.
Tras seis años de relación y más de uno de convivencia, Rocío Flores y Manuel Bedmar parecen haber puesto punto y final a su historia de amor. Son varias las pistas las que han ido sembrando, de manera respectiva, en sus redes sociales. Indicios que hacían presentir que su relación no atravesaba su mejor momento, pero la noticia de su supuesta separación saltaba esta misma semana. Desde entonces, numerosos interrogantes rodean a su piso en común, las familias o los amigos que comparten. La hija de Rocío Carrasco ha querido abrir este nuevo episodio de su vida, en el que parece estrenar soltería renovando una de las partes más íntimas de un hogar: la cama. Concretamente, el colchón. Para ello, ha contado con la ayuda de Olga Moreno, que quien tras la separación de Antonio David está muy próxima a la hija mayor de este; que ha ayudado a la joven a desembalarlo y a dejarlo montado, esperando a que su nueva propietaria lo estrenara esa misma noche.
Además, el estreno de esta parte tan importante en una vivienda viene con un pan bajo el brazo. O bajo el somier. El nuevo colchón es fruto de una colaboración con una marca especializada en descanso, con la que, imaginamos, Rocío Flores habría acordado, como suele ser en estos casos, una retribución económica o un regalo, por mostrar la pieza. Además, insta a sus seguidores a seguir su ejemplo, beneficiándose de un código descuento.
Está en el aire cuáles serán los planes inmediatos de Rocío Flores tras la supuesta ruptura con Manuel, pero parece que, de momento, seguirá instalada en la casa que vio su amor florecer pero, también, acabarse.