Ha llegado el respiro. Tras dos años de lucha, sufrimiento y mucha incertidumbre, Antonio David Flores y sus hijos Rocío y David respiran tranquilos. La Audiencia Provincial de Madrid decidía archivar la causa que enfrentaba al ex guardia civil con Rocío Carrasco por un supuesto delito de violencia de género. Una gran noticia que emocionaba tanto al propio Antonio David como a los suyos. Por fin, poco a poco, salen de la complicada situación que han atravesado. Eso sí, como familia no pueden estar más unidos. Rocío echa una mano en todo lo que haga falta…
“Felicidades a una de las mujeres más importantes de mi vida”. Podría estar refiriéndose a su madre, pero no es así. Rocío Flores, la hija de Antonio David y Rocío Carrasco, deseaba el mejor de los cumpleaños a Olga, la mujer de su padre. Desde que se mudase a vivir con ellos, ha sido como una madre para ella. Están muy unidas y se llevan a la perfección. Tanto que Rocío no duda en dedicar parte de su tiempo a echar una mano en la tienda que regenta.
La joven comentaba en su perfil de instagram que se había pasado por el negocio y, ya que estaba, arrimaba el hombro. “Me iba camino al gym pero me han pillado en ‘Olé&Amén’ por banda y tenía que ayudar con unas cosas para la tienda on-line”, aseguraba Rocío a sus muchos seguidores. La hija de Rocío Carrasco, además de su propio trabajo, está dispuesta a todo lo que necesitan su padre y Olga. La familia, de hecho, depende de ello.
Dificultades económicas
Antonio David reconocía, en exclusiva en Lecturas, las dificultades económicas que pasaba la familia. “No puedo mantener a mis hijos”, explicaba. Todos viven del negocio de Olga y, por supuesto, luchan y se esfuerzan al máximo. Ahora, ya sin la presión del juicio sobre sus hombros, el ex guardia civil va levantando cabeza poco a poco.