Ya lo adelantó ella misma hace solo unas semanas: "No es tan fácil como pasar por quirófano y ya...". En plena recuperación de la lipoescultura a la que se sometió hace dos meses, Rocío Flores ha revelado que para conseguir los mejores resultados a partir de ahora tiene que comenzar con una rutina de ejercicios y cuidar su alimentación al máximo.
Este martes, el programa 'Ya son las 8' hablaba de la temida 'operación bikini' ante la inminente llegada del verano y Rocío Flores ha hablado de su experiencia personal tras sufrir una impresionante transformación física en los últimos años: "Mis subidas y bajadas de peso han sido por varios factores pero después de 'Supervivientes' he bajado de forma progresiva", recalcaba. La hija de Rocío Carrasco ha adelgazado más de 20 kg en los últimos dos años aunque asegura que en estos momentos no lleva una dieta estricta pero si "intento llevar un estilo de vida saludable".
La joven, de 25 años, no niega que ha necesitado la ayuda del bisturí pero no todo es eso. Eso sí, está muy limitada con respecto al deporte ya que no le gusta ni correr ni ir al gimnasio: "Caminar me gusta, por lo menos ejercito", bromeaba. Por el momento tiene prohibido hacer ejercicio a consecuencia de la lipoescultura, una cirugía invasiva que le ha regalado una figura de reloj de arena con la que está encantada: "Lo he pasado muy mal pero ya estoy súper bien y me veo genial, entonces mereció la pena", concluía.
¿Qué talla usa? Rocío Flores mide 1.59m y hace unas semanas hacía público que toda su ropa es de la talla 38 e incluso llevando la faja ya le queda grande. Parece que en los próximos días, la joven tendrá que irse de compras y renovar por completo su armario.